Su sonido, que ha sido descrito como “un millón de niños cantando”, no es nada convencional. Melodías dulces sobre una base de folk pop alternativo. Dulces pero no empalagosas, más bien frescas y muy optimistas. Así es la música de Tom Lark, este cantante y compositor neozelandés, originario de Christchurch, que empezó a escribir canciones en su dormitorio con la única ayuda de una guitarra y de su ordenador.
Tiene 21 años nada más y es atractivo, joven y emprendedor y posee cierta chispa de genialidad y de locura (sólo come pizza margarita). Con una base de folk acústica, una voz algo quejumbrosa y un cierto sentido de narrador de cuentos, sus canciones atrapan a la primera escucha. Son buenísimas por su pura sencillez, su inmediatez, su espíritu alegre y su contagioso optimismo. Estas virtudes son las que convencieron al productor australiano Berkfinger (Architecture In Helsinki, Deep Sea Arcade o PhiladelphiaGrand Jury), para llevarle a su Golden Retriever Studios, en Alemania, y trabajar juntos en la grabación de su álbum de debut. En ello están.
“Something To Tell You” es el primer sencillo que presenta de su Ep de debut y es una melodía cargada de buen feelin´, de melodía positiva y colorida. El videoclip ha sido dirigido por Sam Kristofski, quien ha reconstruido en Auckland, Nueva Zelanda, un estudio de grabación londinense de los años sesenta. Una primorosa reproducción con el ambiente de una película de rock and roll, grabada en 16 mm y con rollos caducados en 1.983. De hecho, el propio Kristofski ha confesado que se ha inspirado en la grabación que realizó Jean-Luc Godard en Olympic Studio de Londres durante el rodaje de la película “Sympathy For The Devil”, con The Rolling Stones. El bromista añadido de algún extra de ciencia ficción aporta algo de originalidad y frescura. Simpático.
Imitando a U2, esta canción y su Ep están disponibles en descarga gratuita. Lo de los irlandeses es para mantenerse en la cima y en el caso de Tom Lark es para darse a conocer. Y los beneficios económicos son muy distintos, mientras que unos tienen el aval y el dinero de iTunes, Tom se conforma con que más gente escuche su música y poder tener actuaciones, publicar algún disco en el futuro y esas cosas. Digamos que está sembrando. Ya veremos qué pasa más adelante, esperemos que recoja una buena cosecha. La semilla es muy prometedora.
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