Folk

Rod Picott ha visto las orejas al lobo y eso le ha inspirado para escribir sus nuevas canciones

Rod Picott publicará en Europa y Reino Unido su nuevo álbum el 6 de septiembre.

El próximo 6 de septiembre, el cantante y compositor estadounidense Rod Picott publicará en Europa y Reino Unido su decimosegundo álbum de estudio, “Tell The Truth & Shame The Devil” a través de Welding Rod Records, y poco después, ya en octubre, iniciará una por UK que empezará el 3 de ese mes en Glasgow y que será la primera de las trece fechas que tiene cerradas por Gran Bretaña y que cerrará en High Wycombe el día 17.

Rod Picott nació en noviembre de 1964 en New Hampshire pero creció en South Berwick, Maine, donde ya estuvo tocando en varias pequeñas bandas locales. Movido por su afán de hacerse un hueco en la música, en 1994 se mudó a Nashville, Tennessee, donde durante algún tiempo se dedicó a tocar el los clubs de la ciudad y fue allí donde se construyó un nombre como cantautor, sobre todo desde el momento en que fue el co-autor de una canción en el álbum “50 Odd Dollars” de Fred Eaglesmith. Después empezó a trabajar como encargado del merchandising de Alison Krauss durante sus conciertos, pero frecuentemente era invitado a subir al escenario para cerrar el show. Ya en 2001 consiguió publicar su álbum de debut, “Tiger Tom Dixon´s Blues” y a partir de ahí, su carrera fue permanentemente hacia arriba.  Su último disco publicado hasta el momento fue “Out Past The Wires”, en 2017.

Ahora es el turno de “Tell The Truth & Shame The Devil”, un disco cuyas cancines fueron provocadas por un importante susto de salud que sacudió al vida de Rod Picott durante el invierno de 2018 a 2019. Este problema duró varias semanas hasta que los especialistas encontraron cual era la causa del problema cardíaco del artista, al tiempo que se sometía a una compleja cirugía de espalada. Al final, esta compleja temporada de su vida influyó y mucho en la escritura de las canciones que estaba preparando, así como en su grabación. Realizada a solas con un modesto equipo de grabación, Picott se propuso hacer un álbum tan honesto, crudo e incontrolado como le permitiese hacer su maltrecha columna vertebral. Quizás por todo ello, el nuevo álbum es completamente acústico, presenta solo su guitarra, una armónica y esa clásica voz desgasta de Picott. Un músico ya conocido por la intimidad y las narraciones vividas de su anterior trabajo y que ahora abre aún más la puerta. Y a todo esto hay que sumar otra buena noticia: su salud está ahora bajo control.

En esta ocasión, Picott quería hacer un álbum completamente despojado de cualquier otra cosa que no fueran las canciones. No estaba buscando tomas perfectas, estaba buscando las tomas correctas. Picott quería la magia y decir la verdad de quién es como compositor y como ser humano. De hecho, el disco comienza y acaba con unos segundos de sonido de naturaleza para hacer saber al oyente que este álbum es diferente. Picott grabó todas las pistas solo, en casa, sin ningún ingeniero y luego las entregó a Neilson Hubbard para mezclarlas. Este es el grupo de canciones más personal que Rod Picott ha lanzado y, de alguna manera, es un recuerdo en cada canción.

A sus cincuenta años, Rod Picott ha logrado una importante audiencia de culto en Estados Unidos y Europa, realiza giras incansablemente y recibe elogios de una crítica entusiasta que aplaude todo lo que hace. Un músico importante.

Salir de la versión móvil