Cello, banjo y guitarra. Nueva York, Nueva Jersey, Nueva Orleans y Haiti. Folk, blues y los cantos negros del Caribe. Poesía y música, esclavitud y libertad. Todo se entremezcla en la vida de Leyla McCalla.
Nacida en Nueva York de padres emigrantes haitianos, Leyla se crió en los suburbios de Nueva Jersey. Todavía adolescente se trasladó Accra, la capital de Ghana, en donde vivió durante dos años. A su regreso, se matriculó en cello y música de cámara en la Universidad de Nueva York y cuando terminó sus estudios decidió que era el momento de trasladarse a Nueva Orleans, para tocar en las calles del Barrio Francés. Cargada con sus propias raíces y experiencias, Nueva Orleans supuso el descubrimiento de un nuevo y apasionante cosmos musical y cultural. Cuanto más iba explorando la historia de Louisiana, de sus lazos con Haití y la cultura de habla francesa, más unida se sentía a la ciudad y a su tradición. Allí fue donde descubrió a los violinistas criollos Canray Fontenot y BéBé Carrière que tanto han influido en su forma de tocar el cello.
La suerte, tantas veces esquiva con los músicos, se cruzó un día en su camino. Mientras tocaba en la calle, llamó la atención de Tim Duffy, fundador y director de la Music Maker Relief Foundation, quien invitó a Leyla a tocar con una prestigiosa banda de cuerda afroamericana Carolina Chocolate Drops. Con esta formación grabó el disco “Leaving Eden”, que fue nominado para un Grammy, y realizó una extensa gira antes de entrar en el estudio para grabar su primer disco en solitario.
El álbum, que se titula “Vari-Colored Songs: A Tribute To Langston Hughes” y en el que Leyla llevaba varios años trabajando, salió adelante gracias a una exitosa campaña de crowfunding, en la que consiguió recaudar 20.000 dólares, cuatro veces más de lo que inicialmente había presupuestado.
Interpretado en su mayoría con cello y banjo, el disco es una unión del folk de los viejos tiempos, de jazz (de todo estilo), de música folclórica tradicional haitiana y algo de cosecha propia. Incluida una voz que revive el espíritu de la mismísima Billie Holiday. Las canciones están basadas en poemas y escritos del poeta, novelista y columnista de Missouri, Langston Hughes, famoso escritor de la década de 1920, vinculado al llamado Renacimiento de Harlem, un movimiento literario que adaptaba los ritmos y los estribillos del jazz a la poesía. Por cierto, Langston viajó a España en 1937 y la Guerra Civil ocupó una parte muy importante en su obra literaria.
He aquí un disco atemporal, en el que describe una realidad no muy lejana, incluso a veces presente. Una demostración del talento de Leyla McCalla como músico, cantante y arreglista, que talla su obra sobre una inspirada variedad de fuentes. Ecléctica, diversa y genuina.
If I had a heart of gold
As some folks I know
I'd up and sell my heart of gold
And head north with the dough
But I don't have a heart of gold
My heart's not even lead
It's made of clay, old Georgia clay
And that's why my heart is red
I wonder why red clay
So red and Georgia sky, so blue
I wonder why it's yes to me
And yessir, sir to you
I wonder why the sky so blue
And why the clay so red
Way down south is always down
And never up instead.
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