Domingo. Vera Wenzel.

Cuatro años ha tardado el grupo barcelonés Vera Wanezel en dar continuidad a su prometedor álbum de debut “Verberna” (La Produktiva, 2011). Eugenio Civera, líder del grupo, cantante y compositor de los temas, plantea que las canciones tienen terrazas, patios, salones, dormitorios y desvanes y que el autor lanza una canción y, al otro lado, el oyente accede o se queda quieto. Duda o avanza decidido. Pues bien, siguiendo este principio tan subjetivo y elástico, la intención de Civera en este nuevo trabajo era abrir las ventanas, empujar los muebles hacia un rincón y dejar que sus composiciones obtuvieran más claridad y conquistasen nuevos espacios. Objetivo conseguido porque escuchar cada corte del disco es como visitar un piso piloto: recorrer e imaginar un nuevo espacio listo para decorar y luego habitarlo y empezar a tener experiencias o a soñarlas.

El nuevo disco se titula “Cosecha” y toma su nombre de una canción muy positiva -“la más positiva que he escrito nunca” según Civera-, que habla de la necesidad de echar la mirada hacia atrás y de asumir las cosas que se han conseguido y celebrarlo. Su ritmo incita a adoptar una posición desenfadada, casi alegre. El álbum se grabó en los estudios Caballo Grande de Barcelona, ha sido coproducido por Ferran Resines y el propio Eugenio Civera, la mezcla es responsabilidad de Cristian Pellejà y la masterización de Yves Rousell. Un buen trabajo de todo el equipo que conseguido que el sonido final sea francamente espléndido.

Pop rock de corte indie bien realizado, con elegancia y elaborada textura y rico en imágenes y sensaciones. Un puñado de redondas canciones dominado por la sugerente voz de Civera, anfitrión necesario para adentrarnos en cada composición, y seriamente respaldado por una banda, Vera Wenzel, que viste de sobriedad y clase cada nota, cada instante.

Sobre la canción “Domingo”, Civera cuenta que la letra surgió a partir de una charla con una amiga que le recordó un verso de cantautor canadiense Leonard Cohen “There is a crack in everything, that´s how the light gets in”. Precisamente esa situación y esta frase son el comienzo de una pieza de fuertes acordes rockeros, posiblemente los más rock que su autor ha utilizado hasta ahora, pero tocados de una forma distinta, casi disfrazados. Una sugerente intromisión en la relación de una pareja y sus mundos individuales y sus dudas existencialistas. El videoclip, un recorrido nocturno entre las luces que salpican la noche barcelonesa, es obra de Caro Zerpa.

Vera Wenzel debería empezar a situarse junto otras estupendas bandas de la Ciudad Condal como Sidonie o Love Of Lesbians y seguramente compartirían a muchos de sus seguidores.

Ella me dijo: ves, las luces entran siempre
por las brechas que tiene todo.
Luego me dijo: ven, voy a enseñarte un truco para evitar
andar sobre el vacío

Hoy ya no me espera,
se acordó de que era
domingo y tenía que guardar

Y eso que yo pensaba:
por cada vez que siento,
la tendría que coronar

Ella vuelve a reír y hace tres nudos con cada palabra que
intento que la atraviese.
Ahora me dice: ves, nunca habrá nada que puedas sujetar
durante más de un rato.

Hoy ya no me espera,
se acordó de que era
domingo y tenía que guardar

Y eso que yo pensaba:
por cada vez que siento,
la tendría que coronar

No volveré a intentar adelantar
No volveré a intentar adelantar

Que hoy ya no me espera,
se acordó de que era
domingo y tenía que guardar

Y eso que yo pensaba:
por cada vez que siento
la tendría que coronar.

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