Stabat Mater -Estaba la Madre, en latín- es una secuencia medieval del Aleluya gregoriano datado en el siglo XIII, atribuido a varios autores, entre los que se encuentran como más probables el papa Inocencio III y el franciscano Jacopone da Todi. El himno comienza con las palabras Stabat Mater dolorosa -estaba la Madre sufriendo-. Como plegaria medita sobre el sufrimiento de María durante la crucifixión de su hijo.
En la historia de la música se han realizado muchas y muy variadas versiones sobre el Stabat Mater. El más famoso de ellos es el de Pergolesi, compositor, violinista y organista italiano del barroco, conocido fundamentalmente como compositor de óperas, obras que hoy se han olvidado por estar escritas en dialecto napolitano. Aunque nació en Iesi, pasó gran parte de su vida en el entorno de la corte de Nápoles, al servicio de aristócratas como los príncipes de Stigliano y el duque Marzio IV Maddaloni Carafa.
En 1752,el reestreno en París de su ópera buffa La serva padrona -compuesta veinte años antes- originaría la famosa Querella de los bufones, disputa que llevaría a la confrontación durante dos años entre los partidarios de lo nuevo -la ópera cómica italiana asociada a la ilustración, frente guiado por el filósofo Jean-Jacques Rousseau- y lo viejo – la tradición, la ópera seria francesa representada por Lully y Rameau. Pergolesi, junto con Paisiello, Galuppi y Cimarosa, es uno de los grandes compositores de óperas buffas del siglo XVIII.
La secuencia Stabat Mater fue incorporada al ritual cristiano en 1727 como la última de las cinco secuencias oficiales de la Iglesia Católica, causando un gran impacto, ya que las cuatro secuencias aceptadas, no se había modificado desde el Concilio de Trento. Por entonces, Pergolesi contaba con 17 años.
Pergolesi murió joven, muy joven, a los 26 años de edad, supuestamente de tuberculosis, en el monasterio franciscano de Pozzuoli, en Nápoles. Allí, en sus últimas semanas de vida, compuso su Stabat Mater, una de las más célebres composiciones religiosas de la historia. La fiesta anual del Dolor de la Virgen, el Viernes anterior al Domingo de Ramos o Viernes de Dolores, era el momento en el que representaba la composición en una procesión por las calles de Nápoles. El texto en latín de la primera de las doce partes en las que se encuentra dividido comienza así:
Stabat Mater dolorosa
Iuxta crucem lacrimosa,
Dum pendebat filius.
Cuius animam gementem
Contristatam et dolentem
Pertransivit gladius.
Estaba la Madre dolorosa
junto a la Cruz, lacrimosa,
mientras pendía el Hijo.
Cuya ánima gimiente,
contristada y doliente
atravesó la espada.