El próximo 9 de febrero, el cuarteto onubense Delbosque publicará oficialmente su primer álbum. El disco, que se llamará “Interferencias”, lo ha grabado en los estudios Grabaciones Sumergidas de El Puerto de Santa María, Cádiz, con Juan Antonio Mateos desempeñando las tareas de producción. El Lp, autoeditado por el propio grupo, saldrá al mercado en formato físico y también estará disponible en todas las plataformas digitales desde ese mismo día.
José Barroso, guitarra y voz, Ale Chaves, otra guitarra, Carlos Almagro, bajo y coros y el batería José Cordero, cuyo lugar ocupa actualmente Alonso Fuentes, empezaron a finales de 2011 como banda instrumental, algo que todavía hoy en día se trasluce en el sonido intenso y progresivo de su música. Aquellos primeros tiempos y esa primera concepción añade a sus canciones de ahora un denso telón de fondo, una especie de muro por el que se perfilan las sombras de sus narraciones.
En el torrente sonoro de Delbosque, por el que las guitarras discurren sin freno y los ritmos galopan a sus anchas, se intuyen la mezcla de influencias diversas, tanto nacionales como internacionales, que van desde Los Planetas, El Hombre Burbuja, Lagartija Nick o Febrero, a Yo La Tengo, Luna, Sonic Youth, Radiohead o Spiritualized. Una inteligente y atractiva combinación de rock espacial, shoegaze, indie, noise y pop rock de los 90. Guitarras pertinaces que calan hasta los huesos, una batería que apabulla, un bajo que retumba y unas voces que recitan angustiadas historias de cotidiana desazón.
Previamente a este esperado debut discográfico, Delbosque había ido publicando una serie de canciones a través de su página de Bandcamp. “Ratas” fue su primera canción, grabada en el otoño de 2013, un single al que siguió un Ep que incluía otros tres temas más: “Interferencias”, “La Movida Cósmica De Antonio Arias” (canción dedicada ex bajista de 091 y líder de Lagartija Nick) y “Precipicio”, y que salió en las navidades de ese año. A principios de 2015, el cuarteto de Huelva volvió a la carga con otro sencillo, “Un Nuevo Mundo”, en el que se percibía un claro avance y un asentamiento en las ideas y los objetivos del grupo.
La propuesta de Delbosque es cada vez más seria, hasta el punto de convencer al jurado del concurso Doñana Rock Museum 2015, que les proclamó vencedores. Y también a los organizadores del Monkey Week, quien vio en ellos a una formación capaz de sorprender por sus canciones directas y sus pequeñas filigranas pop más cercanas a los sonidos de los 80 que a décadas posteriores. A Delbosque también han estado presentes en el Festival Cantero Rock Huelva, en el Anfi-Rock Sound Festival Isla Cristina, en el Lolatown Fest de Cádiz, en el Disorder Music Festival de Huelva y han formado parte del ciclo de conciertos Rock en el Pueblo.
Con la publicación de su primer disco, Delbosque se presenta como una seria opción de futuro y su nombre debería figurar en el cartel de los mejores festivales veraniegos de 2016. Sus canciones son su mejor aval.
Y ahora que por fin he comprendido,
que no estarás nunca conmigo,
que sólo me ves como un amigo.
Y sé que he estado haciendo el tonto,
perdiendo mucho el tiempo,
pero es que no me podía contener.
Y no dijiste nada,
sabiéndolo de sobra,
pues más claro no te lo pude poner.
Y ahora sé que te gusta sentirte,
la reina en todas partes,
y que no dejemos nunca de admirarte.
Y si te veo en los bares,
me siento reflejado,
en los moscardones que llevas al lado.
Y si ves que estoy algo distante,
que ya no soy como era antes,
me estoy esforzando mucho para odiarte.
Para odiarte, para odiarte,
me estoy esforzando mucho para odiarte.
Para odiarte, para odiarte,
me estoy esforzando mucho para odiarte.
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