Celebramos hoy, en las letras del Nobel de Literatura Salvatore Quasimodo, la poesía.
Hermético y social, Salvatore Quasimodo es uno de los grandes de la literatura universal que jugó primero con las palabras construyendo versos en un lenguaje analógico, onírico y oscuro, lleno de conceptos abstractos y absolutos y cargado de yuxtaposiciones, era una poesía elevada e íntima de compresión compleja, alejada por tanto del gran público y vehículo perfecto para zafarse de la censura fascista. Fue precisamente al superar el tiempo de los fascios cuando Salvatore Quasimodo abandonó este hermetismo, íntimamente relacionado con el simbolismo francés de Mallarmè, y rindió por siempre sus poemas a la temática social; en aquella época era ya un literato reconocido y respetado por su maestría poética, por el rigor de sus traducciones de poetas clásicos tanto del latín (Catulo) y el griego como del inglés (Shakespeare) y también por su desempeño periodístico.
Pero antes de llegar ahí, y a pesar de publicar sus primeros poemas en un periódico estudiantil cuando tenía solo 16 años, vivía entonces en Roma. La vida de Salvatore Quasimodo sufrió cambios de notable importancia; nació en Modica, Sicilia, y se trasladó junto a su familia a la localidad de Messina; comenzó, ya en Roma, estudios de ingeniería que no pudo terminar por los apuros económicos que sufría y acabó aceptando una plaza de funcionario aparejador en Reggio de Calabria; en 1930 su vida comienza a mostrar claros tintes literarios y publica su primera obra poética pero no será hasta 1938, viviendo ya en Milán y moviéndose en los círculos literarios de la ciudad, cuando abandone definitivamente su trabajo como funcionario aparejador. A partir de entonces su vida se moverá entre las letras de sus poemas y las de su trabajo como redactor y crítico periodístico.
Recibió el Premio Nobel de Literatura en 1959, momento que aprovechó para defender y ensalzar el papel del poeta y la poesía en las sociedades modernas, en aquellos años, en realidad desde el final de la II Guerra Mundial, el contenido de sus versos era esencialmente social y su pluma periodística era tan crítica con la sociedad del momento como lo había sido con el fascismo anteriormente.
Hoy recordamos a Salvatore Quasimodo de la mejor de las maneras, a través de algunas de sus letras.
Algunas de sus frases célebres
- 1
"La poesía es la revelación de un sentimiento, que el poeta cree que es personal e interior y que el lector reconoce como verdadero."
- 2
"Esa sonrisa me ha salvado de llantos y dolores."
- 3
"Mi soledad se queda a recordarte."
- 4
"Noche terrenal, en tu exiguo fuego me complací alguna vez y descendí entre los mortales."
- 5
"Otoño manso, yo me poseo y me inclino ante tus aguas para beber el cielo, suave fuga de árboles y abismos."
- 6
"Profundo el camino sobre el que descendía el viento ciertas noches de marzo y nos despertaba desconocidos como la primera vez."