Efemérides

Richard Ford, escribe para la gente común en toda su complejidad

El escritor Richard Ford nació en Jackson, Misisipí, el 16 de febrero de 1944.

Richard Ford nació en Jackson, el pueblo en el que Nick Pizzolatto ambientó la historia de Martin Hart y Rust Cohle True Detective. Cuentan que hasta los 18 años no había leído prácticamente nada, y según el mismo reconoce, tuvo unos padres de clase obrera que trabajaron como esclavos para que pudiera tener una vida mejor que la de ellos. Su carrera del escritor comenzó sin pensarlo, cuando tenía 23 años y viajaba con su entonces novia, después mujer, en coche por una carretera de Michigan.

Licenciado en Literatura inglesa y con estudios de Derecho en la Universidad de Michigan, publicó por primera vez en 1976 con escaso éxito. Un buen día, ante uno de los atascos creativos en los que entran los escritores, su mujer le preguntó: ¿Por qué no escribes sobre un hombre feliz? Con aquella pregunta nació Frank Bascombe, un prometedor escritor metido a periodista deportivo y luego a agente inmobiliario que protagonizó la trilogía El periodista deportivo, Acción de gracias y El Día de la Independencia, y que más tarde retomaría en Francamente Frank. De Bascombe, su gran personaje, provienen casi todos sus otros personajes, retratos de gente común de clase media que aspiran a ser mejores, aunque nunca lo consiguen.

Todo en Ford, al que le gusta nadar desnudo en las frías costas de Nueva Inglaterra, es masculino y sensible, como Clint Eastwood. Raymond Carver dijo de él que era el mejor escritor norteamericano en activo. Algunos lo consideran heredero de Hemingway, Faulkner y Mailer -aunque con menos alcohol y mucha menos arrogancia por medio-. Ford nunca ha aceptado que a sus novelas se las incluya dentro del realismo sucio, aunque retrata a la sociedad americana con todas sus fallas y fracturas, y le sirvió para darse a conocer en Europa.

Richard Ford es premio Pulitzer, PEN/Faulkner y cuarenta años después de comenzar su carrera como escritor, fue reconocido como Premio Princesa de Asturias de las Letras 2016. Desde el año 2008 es profesor adjunto en el Centro Oscar Wilde del Trinity College de Dublín.

Algunas de sus frases célebres

  • Imagen: Puedes cambiar de ciudad y alterar las vistas, pero cambiarte a ti mismo es más difícil.
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    "Puedes cambiar de ciudad y alterar las vistas, pero cambiarte a ti mismo es más difícil."

  • Imagen: Nunca he hecho una sola cosa importante en la que ser rápido funcione. Obtengo lo mejor de mí mismo siendo paciente.
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    "Nunca he hecho una sola cosa importante en la que ser rápido funcione. Obtengo lo mejor de mí mismo siendo paciente."

  • Imagen: Cuando te dedicas a esto durante muchos años, acabas entendiendo que no seguirías escribiendo si nadie te leyera.
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    "Cuando te dedicas a esto durante muchos años, acabas entendiendo que no seguirías escribiendo si nadie te leyera."

  • Imagen: Si no fuera disléxico, no sé si sería el mismo tipo de novelista. Mis libros son más pacientes y profundos que acelerados y superficiales.
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    "Si no fuera disléxico, no sé si sería el mismo tipo de novelista. Mis libros son más pacientes y profundos que acelerados y superficiales."

  • Imagen: Me mudé aquí para poder vivir junto al mar. Se que es una forma patricia de ver las cosas, pero así es como me siento. Espero terminar mis días junto al mar.
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    "Me mudé aquí para poder vivir junto al mar. Se que es una forma patricia de ver las cosas, pero así es como me siento. Espero terminar mis días junto al mar."

  • Imagen: La dislexia te obliga a escuchar con atención a los demás si quieres entender algo.
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    "La dislexia te obliga a escuchar con atención a los demás si quieres entender algo."

  • Imagen: Hay un tópico que los americanos usan mucho contra sí mismos, y es pensar que la felicidad sólo se representa con caras sonrientes y montones de carcajadas. Si ése fuera el caso, no sería necesaria una literatura imaginativa.
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    "Hay un tópico que los americanos usan mucho contra sí mismos, y es pensar que la felicidad sólo se representa con caras sonrientes y montones de carcajadas. Si ése fuera el caso, no sería necesaria una literatura imaginativa."