Efemérides

Pierre Teilhard de Chardin, ente la religión y la ciencia

Científico, religioso y filósofo, nació en Sarcenat -Auvernia, Francia-, el 1 de mayo de 1881.

Sobrino-nieto de Voltaire y el cuarto de once hermanos, Pierre Teilhard de Chardin navegó entre los preceptos religiosos desde la misma cuna: su padre era un naturalista aficionado y su madre profundamente religiosa. Sacerdote, jesuita y licenciado en Geología, Botánica y Zoología, por La Sorbona, Teilhard se vio inmerso en el turbio asunto del hombre de Pitdown, un fraude de ley respecto a la antiguedad de unos fósiles.

Trabajó para el Museo Nacional de Historia Natural de Francia, en París, y también se dedicó a la enseñanza en colegios religiosos, actividad que se vio obligado a abandonar cuando sus teorías acerca del origen del hombre y la evolución comenzaron a molestar en el Vaticano. Y es que su postura equidistante entre el Viejo Testamento y lo que la ciencia, concretamente la Paleontología, decían acerca de la evolución no resultaba bien acogida ni por la comunidad religiosa ni por la científica.

Participó en la I Guerra Mundial y viajó no sólo por Europa sino por medio mundo: visitó China en dos ocasiones, recorrió Asia Central y acabó instalándose en Nueva York en 1951 tras haber visitado Etiopía, la India, Java, Birmania, Sudáfrica... entre otros destinos.

El mismo año en el que se instaló en Nueva York entró a formar parte de la Academia de las Ciencias en Francia y 4 años más tarde se despidió del mundo dejando a su albacea el encargo de publicar su obra que estaba, por aquel entonces, sin publicar en su mayor parte.

Algunas de sus frases célebres

  • 1

    "El amor universal no sólo es psicológicamente posible, sino la única, completa y definitiva forma de amar."

  • 2

    "Las grandes verdades se sienten antes de expresarse."

  • 3

    "¿En qué momento llegan a adquirir dos amantes la más completa posesión de sí mismos, sino en aquel en que se proclaman perdidos el uno en el otro?"

  • 4

    "El Amor...Por su ubicuidad, su fogosidad y el espectro innumerable de sus formas, esta extraña potencia ha intrigado y fascinado desde siempre a los maestros del pensamiento humano."

  • 5

    "Necesitamos la esperanza para que nuestra alegría sea perfecta."

  • 6

    "Llegará el día en que después de aprovechar el espacio, los vientos, las mareas y la gravedad; aprovecharemos la energía del amor. Y ese día, por segunda vez en la historia del mundo, habremos descubierto el fuego."

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