El escritor Orhan Pamuk creció en una familia muy parecida a las que él describe en sus novelas Cevdet Bey y sus hijos y El libro negro, en el saludable y occidentalizado barrio de Nisantasi. Desde su infancia se dedicó a la pintura y soñó con ser artista. Después de graduarse en el American Robert College de Estambul, estudió arquitectura tres años, pero abandonó para graduarse en periodismo, profesión que nunca ejerció. Con 23 años renunció a todo, se fue a su casa y se puso a escribir. Había decidido ser novelista.
Siete años después, en 1982, publicó su primera novela, Cevdet Bey y sus hijos, la historia de tres generaciones de una familia adinerada de Nisantasi. Al año siguiente publicó su novela La casa del silencio, que en traducción francesa ganó el Premio de la Découverte Européene de 1991. El castillo blanco, sobre la relación entre un esclavo veneciano y una otomana, se publicó en 1985 en inglés y en otros muchos idiomas, lo que le dio su primera fama internacional. El mismo año, Pamuk se fue a Nueva York, donde durante tres años trabajó en la Universidad de Columbia. Allí escribió la mayor parte de su novela El libro negro, una novela plagada de ironía e intriga en la que describe Estambul a través de la historia de un abogado que busca a su esposa desaparecida. Con esta novela acrecentó su fama tanto en Turquía como en el resto del mundo. Su novela La nueva vida, sobre unos jóvenes universitarios influenciados por un misterioso libro, se convirtió en uno de los más leídos libros en literatura turca... y Me llamo rojo, publicada en 1998, con la que ganó varios premios internacionales y lo aupó como escritor de talla mundial, contribuyendo a su reconocimiento por la academia sueca. Su argumento gira alrededor de las diferentes formas que tienen de retratar el mundo tres iluminadores otomanos del siglo XVI contado a través de una historia de amor, un crimen y la historia de una familia.
Después vinieron Nieve, su primera y última novela política sobre la violencia y tensión entre islamistas, soldados, laicos y nacionalistas turcos y kurdos; Otros colores, una selección de sus artículos sobre literatura y cultura escrita para periódicos y revistas, Estambul. Ciudad y recuerdos, un libro de memorias tempranas del autor; El Museo de la inocencia, una novela sobre el enamoramiento permanente de un hombre con una mujer joven y su intento de construir un museo de los objetos asociados con ella.
Aparte de aquellos tres años en Nueva York, Pamuk ha vivido toda su vida en la misma calle del mismo barrio de Estambul. Ha escrito novelas durante 30 años y nunca ha hecho otra cosa que escribir. Pese a todo, a mediados de los 90 asumió una postura crítica hacia el estado turco como defensor de los derechos humanos y la libertad de pensamiento. En 2006, el mismo año que la academia sueca le concedió el Premio Nobel de Literatura –el segundo nobel más joven de la historia-, la revista Time lo eligió como una de las 100 personas más influyentes del mundo. Sus libros han sido traducidos a 61 idiomas.
Algunas de sus frases célebres
- 1
"En realidad nadie sabe que está viviendo el momento más feliz de su vida mientras lo vive."
- 2
"Si un hombre recurre a las argucias, a pequeños trucos y trampas, es que no está enamorado en absoluto."
- 3
"Toda persona inteligente sabe que la vida es hermosa y que su objetivo es que seamos felices... Pero luego sólo los tontos son felices. ¿Cómo explicárselo?"
- 4
"Los asesinos no surgen de entre los descreídos, si no entre los que creen demasiado."
- 5
"La humildad es una virtud tan poco apreciada en nuestro mundo precisamente porque facilita la vida."
- 6
"El arte de la novela se basa ante todo en la compasión."
- 7
"Lo que nos une es que ambos hayamos bajado el listón en nuestras expectativas de la vida."
- 8
"El amor es el anhelo de abrazar a una persona con fuerza y estar en el mismo lugar que ella. El deseo de abrazarla dejando fuera al mundo entero. La nostalgia del alma de encontrar un refugio seguro."
- 9
"A veces expresar con palabras la realidad tal cual es le conduce a uno a la insinceridad."
- 10
"Los museos de verdad son los sitios en los que el tiempo se transforma en espacio."
- 11
"Recordar es saber lo que se ha visto. Saber es recordar lo que se ha visto. Ver es saber sin recordar."