María de Montserrat Viviana Concepción Caballé i Folch nació en una familia muy humilde, como tantas otras familias de aquellos violentos años treinta. Su padre, Carlos Caballé, químico, murió cuando ella contaba catorce años. Su madre, Ana Folch, sabía tocar el piano y le enseñó los conceptos básicos del solfeo. Aunque quería estudiar música, su familia no podían posibilitarle formación. Así que firmaron un acuerdo con una familia acomodada de Barcelona para ayudar a financiar sus estudios.
Montserrat se inscribió en el Conservatorio del Liceu cuando tenía 13 años. Su madre mintió sobre su edad, diciendo que tenía 15, edad mínima para acceder a los estudios. Allí estuvo 12 años y se graduó con medalla de oro en 1954. Al año siguiente pisó por primera vez un escenario. Fue en el Teatro Fortuny de Reus cantando La Serva Padrona de Pergolesi. En 1956 hizo su debut operístico fuera de España, interpretando Mimí en La Bohème, con la compañía del Teatro Municipal de Basilea, donde también interpretó un nutrido repertorio de papeles, incluyendo Tosca de Puccini, Aida de Verdi, y Arabella y Salome de Strauss.
Su reconocimiento internacional se produjo la noche del 20 de abril de 1965 en el Carneggie Hall de Nueva York, cuando tuvo que sustituir a una Marilyn Horne en avanzado estado de gestación en el papel de la Lucrecia Borgia de Donizetti. Su actuación le valió 25 minutos de aplausos. A la mañana siguiente la prensa publicó: Cuando Caballé empezó su primera aria hubo un cambio perceptible en el ambiente. Pareció por un momento que todo el mundo hubiese dejado de respirar.
Ha interpretado más de ochenta personajes operísticos, que van desde la ópera barroca, hasta Verdi, Wagner, Puccini, y Richard Strauss en papeles tan diferentes como Norma, Salomé, Violeta, la Marschallin, Semiramide o Isolda. También interpreta canciones populares españolas. Tuvo una incursión en la música pop junto a Freddie Mercury en Barcelona, que se convirtió en el himno de los Juegos Olímpicos de 1992.
Su repertorio es enorme. Sus roles en escena alcanzan casi los 90, y probablemente no tiene rival. Ha grabado más de 80 títulos, la mitad de los cuales son óperas completas. Ha cantado todos los grandes roles del repertorio, aunque la máxima admiración la alcanza en sus interpretaciones belcantísticas. Por su fondo interpretativo de gran poder emocional y dramático, no es de extrañar que muchos la consideren la única sucesora de María Callas en el rol de Norma.
Algunas de sus frases célebres
- 1
"Trabajo deprisa para vivir despacio."
- 2
"Cuando amas tu profesión, no esperas nada. Solo que guste."
- 3
"Mis padres me pusieron nombre de montaña porque sabían que iba a ser grandota."
- 4
"Es ridículo! 'Diva' viene del griego, quiere decir 'divina'. ¡Ya me dirá usted que tengo yo de divina! Nada."
- 5
"Salir a un escenario es casi como ir a un altar. Se debe ir con una actitud de respeto hacia la música."
- 6
"Yo canto la Norma como si fuera una Medea. Tú tienes que cantarla como el cisne que Bellini quería. Tienes la voz para hacerla así."
María Callas.
