Kristin Scott Thomas, actriz con clase, conocida en todo el mundo por su talento, elegancia y misterio, nació en Redruth, Cornwall, Inglaterra, el 24 de mayo de 1960, aunque creció en Dorset. Con 19 años se trasladó a París después de que una de sus profesoras de interpretación en la Central School of Speech and Drama de Londres -no con mucho ojo para descubrir jóvenes talentos- le dijera que era una actriz nefasta sin ningún futuro en el mundo del teatro, y en Francia acabaría estableciendo su residencia. Se graduó en la Escuela Nacional Superior de las Artes y Técnicas Teatrales.
Siempre le han gustado los retos y por eso escoge con inteligencia los papeles que interpreta. Aunque ha trabajado en multitud de proyectos en cine, televisión y teatro, alcanzó la fama en 1994 gracias al éxito de la divertida Cuatro bodas y un funeral con la que consiguió, por su papel de enamorada no correspondida, un premio BAFTA a la mejor actriz secundaria. Dos años después, Anthony Minghella la convirtió en estrella y amante de El paciente inglés. Más tarde interpretó a aquella mujer fría que sucumbía ante los encantos de Robert Redford, El hombre que susurraba a los caballos. Ahora, con más de 60 películas en su haber, ha llegado a un pacto consigo misma para no ganarse la vida con el cine, solo intervenir en él por placer y devoción. Quizás por eso, ha pensado seriamente en retirarse. Estamos seguro que haga lo que haga lo hará con la misma clase, talento y elegancia.
Algunas de sus frases célebres
- 1
"Mi reto como madre es que mis hijos, cuando cumplan los 20, no tengan que ir al psiquiatra para hablar de mí."
- 2
"El actor de cine asume que será manipulado."
- 3
"La cultura francesa toma muy en serio el envejecimiento. Hay mucha menos discriminación por la edad que en los países anglosajones."
- 4
"Vi a un montón de mujeres del mi edad allí, todas luciendo guapas, espectaculares y sanas, así que me sentí como un bolso viejo a su lado. Llegué a pensar que quizá es el momento de hacer algo al respecto, de hacerme un lifting."
- 5
"Es imposible negar que la película El Paciente Inglés ha cambiado mi vida. Y no me quejo."
- 6
"A menos que nuestra esperanza de vida supere los 150 años, las mujeres por encima de los 50 no son una opción viable en la industria del cine."
- 7
"Cuando se comparan los dos trabajos, actuar en el teatro es muy enriquecedor e interpretar en el cine implica una entrega constante, te fagocita."
- 8
"Me he dado cuenta de que he hecho las cosas que se hacer y ya no lo puedo seguir haciendo. Me aburre, así que lo dejo."