Es, sin duda, uno de los grandes de la historia británica y del mundo, su lenguaje poético es comparable al de Shakespeare y su saber político lo convirtió en una de las principales fuentes de conocimiento utilizadas para la redacción de la Constitución estadounidense. Es John Milton y nació en Londres el 9 de diciembre de 1608.
Desde niño mostró gran inteligencia y gusto por el estudio, estudió en la escuela de la Catedral de San Pablo e ingresó en el Christ's College de Cambridge, donde pasó momentos complicados al principio, tanto que sus compañeros mostraban por él el mismo rechazo que él sentía por ellos por considerarlos intelectuamente inferiores a él; tuvo además importantes diferencias con su tutor que terminaron con su expulsión temporal del centro. A su regreso Milton continuó su periplo doloroso y solitario en su educación hasta que comenzó a publicar sus primeros poemas, eso le granjeó el respeto de sus compañeros y su vida fue entonces más agradable.
Se licenció Cum Laude y pasó los años siguientes, cinco o seis, en Londres, tiempo que dedicó a escribir, al aprendizaje lingüístico y la lectura de los clásicos en un acto de velada rebeldía contra el plan de estudios que acababa de licenciarlo puesto que se basaba en la memorización; Milton hablaba inglés, italiano, francés e incluso holandés, era un hombre de gran cultura que completó con un intenso viaje a Europa.
París, Florencia, Roma y Ginebra contaron con su visita; regresó a Inglaterra ante las noticias de una posible Guerra Civil; ya en Londres ejerce como profesor particular de jóvenes aristócratas y se involucra en política siendo crítico con la estructura eclesiástica inglesa del momento, además Milton era republicano.
Se casó y el matrimonio no resultó bien, su esposa lo abandona y llegan entonces sus ensayos más importantes, sobre el divorcio y también sobre la educación; llegó después la reconciliación y el nacimiento de sus tres hijos, su esposa muere en el parto del cuarto y poco después el menor de sus tres hijos también fallece. Por aquel entonces Milton es Ministro de Lenguas Extranjeras.
Milton perdió la vista debido a un glaucoma pero no dejó de trabajar sino que continuó haciéndolo gracias a un asistente personal; se casó y fue padre de nuevo pero madre e hija fallecen cuando la pequeña contaba apenas dos años, ese mismo año muere Cromwell y con el se inicia el camino hacia el fin de Milton que se mantuvo fiel a sus ideales republicanos, lo que le costó acabar con sus huesos en la cárcel de la que salió sólo por la intervención de algunos amigos influyentes.
Todavía le daría tiempo a casarse una vez más y a continuar no sólo con sus escritos, siempre dictados a sus asistentes, y su trabajo con los jóvenes aristócratas de la época. En 1674 se despidió del mundo dejando tras de si un gran legado literario.
Algunas de sus frases célebres
- 1
"Dame la libertad de saber, de expresar y argumentar libremente de acuerdo con la conciencia, sobre todas las libertades."
Give me the liberty to know, to utter, and to argue freely according to conscience, above all liberties.
- 2
"Nada es más beneficioso que la autoestima en conexión con lo que es justo y correcto."
Nothing profits more than self-esteem, grounded on what is just and right.
- 3
"Quien mata a un hombre mata a una criatura razonable, imagen de Dios, pero aquel que destruye un buen libro, mata la razón en sí misma."
Who kills a man kills a reasonable creature, God's image, but thee who destroys a good book, kills reason its self.
- 4
"La belleza es el orgullo de la naturaleza y debe mostrarse en las cortes, las fiestas y en los actos de gran solemnidad."
Beauty is nature's brag, and must be shown in courts, at feasts, and high solemnities.
- 5
"Ser ciego no es miserable; no ser capaz de soportar la ceguera, eso es miserable."
To be blind is not miserable; not to be able to bear blindness, that is miserable.
- 6
"Cuando las quejas son libremente escuchadas, profundamente consideradas y rápidamente resueltas, entonces se alcanza el más elevado límite de libertad civil que los hombres sabios pueden buscar."
When complaints are freely heard, deeply considered and speedily reformed, then is the utmost bound of civil liberty attained that wise men look for.