Efemérides

Enrique Tierno Galván, el mejor alcalde de Madrid desde Carlos III

Enrique Tierno Galván, alcalde de Madrid, admirado y querido, nació en en la misma capital el 8 de febrero de 1918.

Cuando Carlos III llegó a Madrid desde Nápoles a mediados del siglo XVIII, se encontró con una ciudad sucia y maloliente, tan miserable que su biógrafo, Fernán Núñez, calificó a la ciudad de pocilga. Por eso, contando con el asesoramiento de los marqueses de Esquilache y Ensenada, el rey se propuso transformar la capital como preámbulo al sueño de transformar el país. Inició un plan de ensanches sin precedentes, con plazas monumentales como Cibeles y Neptuno, construyó el Jardín Botánico, el Hospital San Carlos, el edificio del Museo del Prado y el palacio del Buen Retiro. También se urbanizaron calles, se estableció un servicio de alumbrado público, de recogida de basuras y se excavó una red de alcantarillado.

Tierno Galván accedió a la alcaldía de Madrid en 1979, en las primeras elecciones municipales democráticas celebradas después de cuarenta años. En su caso, Tierno no transformó la fisonomía de Madrid –al menos, no tanto como Carlos III-, aunque capitaneó una transformación mental sin precedentes históricos en el tiempo: devolvió la ciudad a los madrileños, desprovistos hasta entonces de cualquier sentimiento de pertenencia a una ciudad que durante los años de la dictadura convirtió a sus alcaldes en simples emisarios gubernamentales que obraban de espaldas a la sociedad civil madrileña. Tierno había nacido en Madrid, aunque pasaría sus primeros años en el pueblo de Soria del que eran sus padres. En 1934 inició la carrera de Derecho, estudios que hubo de interrumpir hasta licenciarse en Derecho en 1942 y en Filosofía y Letras en 1944. Su vida, siempre vinculada a la docencia, se desarrolló entre Murcia, Salamanca y Madrid, de cuyas universidades fue catedrático de Derecho Político, oposición en la que obtuvo el número dos, pues el primer puesto lo obtuvo el que sería uno de sus más destacados rivales políticos, Manuel Fraga.

Tierno poseía una sólida formación marxista y unos conocimientos enciclopédicos en muchas de las ramas del saber, desde el Derecho a la Historia, la Filosofía y la Sociología. Así, desde la Universidad ejerció un destacado papel en la oposición al régimen franquistas, por lo que multado, expedientado y finalmente expulsado de la cátedra en 1965, junto a los profesores Agustín García Calvo, José Luis López Aranguren y José Montero Díaz. Se marchó a Puerto Rico donde impartió clases y cursos, y en Princeton fue distinguido con un doctorado honoris causa, antes de que recuperara su cátedra por orden del Ministerio de Educación del primer Gobierno de la Monarquía. Anteriormente, todavía en la clandestinidad, había fundado el Partido Socialista del Interior, más tarde Partido Socialista Popular, que se integraría en el PSOE después de las elecciones de 1977. En abril de 1979, aunque la mayoría de los votos fueron para UCD, fue nombrado Alcalde de Madrid con el apoyo del Partido Comunista, apoyo que se revalidó en la siguiente legislatura.

Tierno fue considerado, incluso por sus adversarios dentro del partido, como un rival político, aunque siempre como una persona de elevada coherencia ideológica y sin lugar a dudas, como el edil de mayor estatura intelectual. Educado, adusto en el gesto, el viejo profesor siempre vestía con traje cruzado y corbata, quizás para aparentar más edad de la que realmente tenía. Tierno supo esgrimir como pocos su gran capacidad de comunicar, lo que unido a su fino olfato para la política le sirvió para ganarse el afecto de muchos madrileños, utilizando con un acentuado sentido del humor sus bandos municipales, la defensa de los animales, y el apoyo a los jóvenes, aunque no dudaba en castigar al más pintado con el más docto de sus sarcasmos.

Algunas de sus frases célebres

  • Imagen: Todos tenemos nuestra casa, que es el hogar privado; y la ciudad, que es el hogar público.
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    "Todos tenemos nuestra casa, que es el hogar privado; y la ciudad, que es el hogar público."

  • Imagen: Las ideologías llevan inevitablemente a la decepción, porque tienden a lo perfecto, que luego el contacto con la vida real hacen imposible.
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    "Las ideologías llevan inevitablemente a la decepción, porque tienden a lo perfecto, que luego el contacto con la vida real hacen imposible."

  • Imagen: Los bolsillos de los gobernantes deben ser de cristal.
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    "Los bolsillos de los gobernantes deben ser de cristal."

  • Imagen: Toda gran revolución política es una gran revolución moral. Toda gran revolución moral supone una gran revolución política.
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    "Toda gran revolución política es una gran revolución moral. Toda gran revolución moral supone una gran revolución política."

  • Imagen: El poder es como un explosivo: o se maneja con cuidado, o estalla.
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    "El poder es como un explosivo: o se maneja con cuidado, o estalla."

  • Imagen: Es difícil ser bueno y fuerte a la vez. Y, por lo común, cuanto más fuerte se es menos razón se tiene.
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    "Es difícil ser bueno y fuerte a la vez. Y, por lo común, cuanto más fuerte se es menos razón se tiene."

  • Imagen: Un Estado sin limitaciones es el peor enemigo del hombre.
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    "Un Estado sin limitaciones es el peor enemigo del hombre."

  • Imagen: La democracia es la transposición de lo cuantitativo a lo cualitativo: que lo que quieren los más se convierta en lo mejor.
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    "La democracia es la transposición de lo cuantitativo a lo cualitativo: que lo que quieren los más se convierta en lo mejor."

  • Imagen: La política ha dejado de ser una política de ideales para convertirse en una política de programas.
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    "La política ha dejado de ser una política de ideales para convertirse en una política de programas."

  • Imagen: ¡Rockeros: el que no esté colocado, que se coloque... y al loro!
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    "¡Rockeros: el que no esté colocado, que se coloque... y al loro!"