Elizabeth Arden fue el nombre comercial con el que se rebautizó la canadiense Florence Nightingale Graham, nacida en Woodbridge, cerca de Toronto. Era la cuarta hija de un farmacéutico y su primer trabajo fue como enfermera, estudios que le permitieron adquirir un profundo conocimiento de la salud. Así que en 1908 llegó a Nueva York buscando hacer realidad el sueño americano y encontró trabajo en un salón de estética. Dos años después, asociada con otra Elizabeth, Hubbard, abrió un modesto salón en la Quinta Avenida, aunque las diferencias entre las dos llegaron pronto y Arden compró la parte del negocio de Hubbard con dinero que le prestó su hermano. Nacía así el Red Door Saloon de Nueva York, sinónimo de su nombre desde entonces.
En 1912 desembarcó desde Melbourne la polaca Helena Rubinstein, el mismo año que ella viajaba a París para aprender las técnicas de tratamiento y masajes faciales tan comunes en los salones de belleza de Francia. Ambas terminaron creciendo a la par y convirtiéndose en empresarias con todo un imperio, copiándose, espiándose, robándose empleados, hasta extremos casi enfermizos. Dotada de una innata y extraordinaria capacidad comercial, el crecimiento del imperio Arden fue sorprendente. Introdujo en Estados Unidos el maquillaje para ojos, comercializó un set para maquillarse en casa, sin necesidad de desplazarse al salón de belleza, acabó con el concepto de que una misma crema servía para todo y fue la primera compañía que realizó campañas de publicidad destinadas a la gran pantalla.
En 1916, Elizabeth Arden ocupaba el primer lugar en ventas de prestigio para el cuidado de la piel en todo el país, y ofrecía una gran variedad de productos de tratamiento de la piel. Durante las tres décadas siguientes, Elizabeth Arden abrió salones y expandió su marca por Europa, Canadá, Australia y América del Sur.
Algunas de sus frases célebres
- 1
"Estar guapa es un derecho con el que nacen todas las mujeres."
- 2
"No hay mujeres feas, solo mujeres que descuidan su belleza."
- 3
"La belleza es saber que eres una en un millón."
- 4
"Puedo escoger a las mujeres buenas, pero no he tenido suerte con mis hombres."
- 5
"La belleza es saber que somos seres únicos y diferentes."
- 6
"No estoy interesada en la edad. La gente que me dice su edad es tonta. Uno tiene la edad que siente tener?."
- 7
"Querido, no te olvides nunca de un pequeño detalle: el negocio es mío, tu sólo trabajas aquí."
Dirigiéndose a su marido, directivo de la compañía.