Después de la II Guerra Mundial surgieron en Europa una serie de nuevas tendencias artísticas que llegaron para explicar todo lo que no podía ser expresado mediante lenguajes antiguos. El interés por crear nuevos lenguajes creativos también se dejó sentir en la pobre España de los años cincuenta.
En muy pocos años, los músicos de la llamada Generación del 51 –así llamada por ser 1951 el año en que algunos de sus miembros acabaron los estudios del Conservatorio- tuvieron que asimilar el atonalismo expresionista, el dodecafonismo, el serialismo integral y las formas abiertas y aleatorias. Pero nuestros músicos no se limitaron a ponerse al día frente al retraso con relación a otros países, sino que pronto estarían preparados para ofrecer sus propias ideas en los círculos internacionales.
Probablemente, el grupo más representativo de esta generación de jóvenes músicos nacidos en torno a 1930 fue el grupo madrileño Nueva Música, entre cuyos miembros más destacados se encontraba nuestro personaje de hoy, Antón García Abril, un gran conocedor de la música del medievo, del renacimiento, del barroco –sobre todo de Bach, de Haydn, Mozart y Beethoven, de los románticos alemanes, Schubert, Mendelssohn, Schumann, Brahms, y de los románticos cosmopolitas, Chopin y Listz. También de la ópera italiana y francesa, y Wagner y los nacionalistas, hasta llegar a Debussy, Ravel, Satie y el Grupo de los Seis. Y sobre todo Bartók, y Stravinsky, Hindemith y Prokofiev, y la música española culta... todo un sumatorio que terminaría por moldear su tan personal lenguaje musical.
Antón García Abril tiene carácter de vanguardia dentro del contexto musical de su generación, valoración que adquirió desde muy pronto y con un reconocimiento generalizado. García Abril es uno de los compositores de más extensa producción musical –más de 700 obras- repartidas en todos los géneros, desde la ópera en Divinas palabras, el género sinfónico en Hemeroscopium y Celibidachiana, orquestales con instrumentos solistas en Concierto Aguediano y Mudéjar, cantatas con el Cántico delle creature, Cántico de La Pietá, Alegrías o el Salmo de alegría para el siglo XXI; ballet, música de cámara, pequeñas obras para piano, violín, guitarra y algunas corales, siendo uno de los músicos españoles más escuchado e interpretado en las salas de conciertos.
Sin embargo, por lo que más le recuerda el gran público es por sus más de doscientas bandas sonoras, entre las que se encuentran El perro, Los pájaros de Baden-Baden, El crimen de Cuenca, Gary Cooper que estás en los cielos, La colmena, Los santos inocentes, Fortunata y Jacinta, Curro Jiménez, Los camioneros, Anillos de oro, Ramón y Cajal y El hombre y la tierra.
Algunas de sus frases célebres
- 1
"En música está todo hecho, pero al mismo tiempo, está todo por hacer. De no ser así, estaríamos asistiendo a un cataclismo universal."
- 2
"Creo en la posibilidad de crear una obra que como arte y como ciencia tenga el mismo valor."
- 3
"El único público que existe para un compositor es él mismo."
- 4
"Si no existe una gran formación tradicional en el equipaje técnico que el alumno va a recibir, difícilmente podrá avanzar hacia la conquista de lo nuevo."
- 5
"La técnica al servicio de la nada no sirve para nada, y la música que se produce por sentimientos solamente y no tiene la técnica adecuada, tampoco."
- 6
"Los jóvenes de hoy deben abandonar la idea de que para ser moderno, para ser contemporáneo, hay que hacer música muy difícil y muy disonante."
- 7
"La música es comunicación entre los seres humanos. Y, al ser un lenguaje, tiene sus propios símbolos, su propia gramática."
- 8
"Me siento un músico español y por ello, y sin complejos, universal."
- 9
"El objetivo de las vanguardias, está estudiado científicamente, acaba siendo afirmar y reafirmar todo lo anterior. Al revés de lo que dicen sus postulados."
- 10
"La música tiene que ser un arte de belleza sonora y nunca cercana al ruido."
- 11
"Estoy en desacuerdo con aquellos que deseando hacer una música rabiosamente de vanguardia desdeñan la del pasado, así como con los que sólo se identifican con los compositores del ayer, cerrando los oídos ante el arte musical de nuestros días."