Patatas rellenas de maíz y panceta.

Uno de los alimentos más versátiles de la gastronomía, es la patata, admite todo tipo de preparaciones; fritas, al vapor, al horno, guisadas, en papillote etc… Son una excelente guarnición en multitud de platos aportando siempre un suave y cremoso sabor.

Un pequeño consejo a tener en cuenta cuando cocinéis la patata, es que se debe emplear siempre una cocción lenta para evitar así la destrucción de su vitamina C al mínimo. Esta hortaliza libre de grasas, ayuda a aumentar la energía y a controlar los niveles de azúcar en la sangre. Posee una generosa fuente de potasio y de carbohidratos en forma de almidón, que la convierten en un alimento de gran calidad para nuestro organismo. No hay que olvidar que la mayor parte de fibra y nutrientes se encuentran en su piel, por lo que ésta receta es perfecta para consumirla con todas sus propiedades.

Hoy vamos a preparar unas patatas rellenas de panceta, y maíz gratinadas al horno que rociadas en un espectacular aceite de pimentón, convertirá a la humilde patata en toda una explosión de sabor.

¿Queréis saber cómo?

Ingredientes

Ingredientes: 4 patatas medianas – 2 loncha de panceta de cerdo – maíz dulce en grano - quedo cheddar rallado– 1 cebolleta – cebollino – ¼ vaso de vino blanco – pimentón dulce – sal – pimienta y aceite de oliva.
Precalentar el horno a 200º calor arriba y abajo.

Receta en 12 pasos

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Ingredientes: 4 patatas medianas – 2 loncha de panceta de cerdo – maíz dulce en grano - quedo cheddar rallado– 1 cebolleta – cebollino – ¼ vaso de vino blanco – pimentón dulce – sal – pimienta y aceite de oliva.

Precalentar el horno a 200º calor arriba y abajo.
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Lavamos las patatas y secamos muy bien. Untamos el exterior con aceite y sal, de esta manera nos quedará una piel tersa y crujiente. Procurad que todas las patatas tengan el mismo tamaño para que se hagan al mismo tiempo.

Colocamos en una fuente y la introducimos en el horno durante 25-30 minutos. Movemos de vez en cuando para que se doren por todos los lados. Cuando estén listas sacamos y dejamos enfriar.
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Cortamos y retiramos la piel de la panceta, Partimos en cuadraditos pequeños.
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Añadimos la panceta en una sartén y freímos.

Cuando esté doradita, aromatizamos añadiendo el vino blanco dejando que evapore el alcohol.

Después de este paso, añadir unos trocitos más de panceta, así nos encontraremos algunos con el delicioso aroma a vino blanco, y otros, con el puro sabor del tocino. Reservamos.
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Troceamos muy menudito la cebolleta y el cebollino.
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En un bol ponemos la panceta de cerdo, el maíz, la cebolleta, y el cebollino picado.

Mezclar muy suavemente y reservar.
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Cuando nuestras patatas estén frías, partimos por la mitad y ayudándonos de una cuchara vaciamos parte de su interior incorporándolo en el bol donde tenemos el resto de los ingredientes.
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Salpimentamos. Añadimos una cucharada de pimentón y un generoso cordón de aceite, para suavizar la textura.

Mezclamos hasta que todos los componentes estén bien integrados.
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Con el resultado rellenamos nuestras patatas.
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Añadimos generosamente queso cheddar rayado.

Introducimos al grill por unos 2 ó 3 minutos para que gratine el queso.
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Una vez listas vamos aderezar estas riquísimas patatas con aceite de pimentón.

Para hacer vuestro propio aceite, añadir en un bol: 5 cucharadas de pimentón dulce (si os gusta picante podéis añadir 1 cucharada de pimentón picante) y 150 ml de aceite. Batimos hasta emulsionar. Lo pasamos por un colador de malla fina o tela y lo introducimos en un biberón de cocina. Lo podemos conservar por varias semanas y puede serviros de aderezo para otros muchos platos.
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Y voilá… listas unas deliciosas patatas rellenas de panceta con aceite de pimentón.