Gourmet

¿Pagarías 1.000 dólares por un sándwich de pastrami?

No sabemos si se trata del sándwich más caro del mundo pero es, sin duda, el más espirituoso...

1.000 dólares, algo más de 800 euros, es lo que te costará degustar este sándwich ¿una locura? gastronómica, sin duda pero no es la única que conocemos; hemos visto el taco más caro del mundo y también una hamburguesa de precio estratosférico, son bocados que no están hechos para ser populares, a veces ni tan siquiera para formar parte de la carta de ningún restaurante, son esos caprichos que se concede un chef entre fogones, una concesión a su creatividad a la que, por una vez, dejan actuar sin ponerle más límete que el del buen gusto en boca.

Sumanos a nuestra galería de bocados impagables, en la que tenemos ya un taco de 20.    euros y una hamburguesa de unos 1.800 euros ocupando espacios destacados, un sándwich un poco más modesto pero destaca igualmente entre todos los sádwiches por su precio, unos 800 euros, un sándwich excepcional creado que se sirve en el restaurante de Long Island DOMA Land + Sea con motivo de la celebración de la Super Bowl.

¿Qué lleva o cómo se prepara este sándwich para que cueste algo más de 800 euros? las razones son varias, en cuanto a los ingredientes basta decir que entre ellos se incluyen trufa blanca y negra, láminas de oro comestible, mostaza infusionada con champán, foie, remolacha infusionada con vodka Stoli Elit y ali oli de azafrán; claro que no sólo es cuestión de ingredientes, el precio sube también por los detalles de la preparación: la carne de ternera utilizada en estos sándwiches como su ingrediente principal se seca y pasa una semana en una salmuera con whisky Glenivent de 25 años, se aliña después con café de Indonesia y se cocina a fuego muy lento (a baja temperatura); el pan sufre también una preparación especial añadiendo a sus ingredientes whisky de centeno y polvo de oro; y por si todo ésto no fuera lujo suficiente, este excepcional sándwich de pastrami se sirve con un copa de champán de Louis Roederer.