Conseguir convertir lo estético en cotidiano es todo un arte. Hay pocas firmas que logran transformar en verdadero diseño todas las piezas y objetos que decoran nuestro hogar y están presentes en nuestro día a día.
La firma Seletti es una de ellas y tiene la cualidad de hacer que nada sea lo que parece. Su exclusividad unida al diseño que desprenden todas y cada una de las piezas que firma la marca, convierten cada producto en único, original y muy llamativo.
Un porta cepillos para el baño puede ser un divertido barco de porcelana, cada bombilla es una joya de incalculable valor y brillo, los humidificadores que cuelgan del radiador están firmados por Pantone y las tablas sobre las que partimos nuestros ingredientes son auténticos vegetales. Nada es imposible, incluso los dinosaurios han vuelto para sostener nuestras bandejas de pasteles.
Seletti es la solución para todos aquellos que quieran soñar cada día y que se resistan a que la rutina acabe con la creatividad. Cada producto otorgará un toque llamativo a la estancia en la que se encuentre, impregnándola del carácter italiano de la firma, una esencia que lleva afianzándose desde que en 1964 su fundador Romano Seletti comenzara a viajar por el mundo con el objetivo de importar productos para el hogar.
La marca colabora con jóvenes diseñadores que quieran materializar lo que ellos conciben como “la idea de una nueva belleza”. Para Seletti, esta ambiciosa idea es la evolución y también la verdadera revolución que les convierte en especiales, y a nosotros nos encanta.
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