Con más de 100 años de historia en sus barricas y habiendo conocido ya tres siglos, los vinos y vermuths Martínez Lacuesta tienen un bouquet especial, el cuerpo de un Rioja con historia, la de su bodega y la familia que la regenta desde que corría el año 1895...
Allende los tiempos nace la bodega de las manos de Félix Martínez Lacuesta, y tras sus primeros pasos, las primeras exportaciones, la primera tienda en Madrid... y así hasta convertir sus caldos en vinos de Reyes y Papas, regando eventos y viajes de la Familia Real y del Papa Viajero, Juan Pablo II.
Toda esta historia vivida año tras año y generación tras generación, culmina con la inauguración de la nueva bodega en 2011, que es de visita obligada para los amantes de la vida y viajes alrededor del vino, del enoturismo.
Y es que no sólo puedes trasladarte a un mundo que gira entorno al vino visitando las nuevas instalaciones de la bodega, rodeadas de viñedos; o participar en una cata que te permita descubrir qué aromas y sabores despiertan tus sentidos; o degustar una comida en uno de sus dos comedores acompañando un menú de la tierra riojana que pisas por algún vino de la casa; o hacerte en la enotienda con esa botella que regalar o regalarte... también puedes convertirte en un miembro del club de barricas y criar tu propio vino, que se elaborará en las mejores condiciones de la bodega para que, llegado el momento, te lo lleves a casa embotellado y etiquetado, listo para degustar y regalar.
No podemos cerrar esta visita a la bodega sin brindar contigo con el vino más moderno, Hinia, de 2009: un caldo de lágrima densa, fluida y tintada; muy potente en la nariz y denso en la boca... Life Tastes Good.
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