Que tenga cuerpo y carácter. Y calidad. Que su sabor se convierta en un recuerdo que perdura en el paladar, en los sentidos y en la memoria. Que acompañe a grandes momentos. Que provenga de ésta o de aquella Denominación de Origen. Son muchas las razones que guían la elección de un buen vino. Son muchas las que hacen ser fiel a una bodega, a una referencia. Y la conciencia social también debería sumarse a la lista.
La tiene y lo demuestra la bodega Remírez de Ganuza, que donará la facturación neta obtenida de la cosecha 2005 de uno de sus vinos más especiales, el reserva ‘María’, a la Fundación Síndrome de Down de Madrid.
Este vino que, por primera vez se elaboró con las uvas de la añada 2003, es un homenaje a la hija fallecida de Fernando Remírez de Ganuza, el fundador. Desde la primera cosecha, el importe íntegro de las ventas ha sido destinado a distintos fines benéficos, en el caso de las dos primeras a la AECC (Asociación Española Contra el Cáncer) para financiar proyectos de investigación.
En esta ocasión, se trata de la añada 2005 del Reserva Especial de Remírez de Ganuza; no en vano para su elaboración se seleccionan las mejores barricas de la bodega y las mejores uvas de la viña La Coqueta, una de las más próximas a la bodega y, por lo tanto, una de las más cuidadas por el fundador de la bodega.
Con el objetivo de hacer el mejor vino, cada una de las barricas utilizadas se elige por su especial finura y calidad. Además, a los sistemas de control de fermentación y crianza, ya de por sí muy exhaustivos en Remírez de Ganuza, en el caso de “María” hay que añadir una dedicación y un cuidado excepcionales.
En total se pondrán a la venta unas 1.500 botellas. Y se estima que la donación a la Fundación Síndrome de Down de Madrid alcence los 120.000€.
María Remírez de Ganuza 2005 puede adquirirse en tiendas especializadas y a través de la bodega y la Fundación Síndrome de Down de Madrid. El precio recomendado de venta al público es de 130€.