Bebidas

Un whisky de un cuarto de siglo

El más raro y especial de los wiskies de Glenmorangie, complejo, intenso, sugerente...

Agua de vida del valle de la tranquilidad. Como si de parte de una leyenda de buscadores de la vida eterna se tratara, es en realidad el modo en que se traduciría Glenmorangie whisky. Del latín Aqua Vitae, con que se denominaba a los destilados en el medievo, al Gaelico Uisge Beatha, que en inglés pasaría de uskebeaghe, a usquebae y al whisky de un finalmente castizo güiski. Y del mismo Gaelico 'gleann mor na sith' (valle de la tranquilidad), se supone el origen etimológico de Glenmorangie.

Los secretos de la destilación del aquavitae se estima que llegaron a Escocia e Irlanda durante el medievo y la primera producción de whisky escocés de la que se tiene constancia data de 1494.  Glenmorangie sólo tiene 160 años de historia, sólo, aunque en honor a la verdad en el lugar en el que William Matheson fundó la destilería en 1843 se producía destilados al menos desde 1738. Una larga experiencia.

Y 25 son los años de envejecimiento de este whisky. Veinticinco en barricas de roble blanco americano, de jerez oloroso y de Borgoña francés, que sólo se utilizan dos veces frente a las más de seis habituales. Destilado utilizando los famosos alambiques de cuello de cisne de la destilería, los más altos de Escocia, de hasta 8 metros.  Y para garantizar la calidad y el origen de un auténtico Whisky Escocés de Malta de los Highlands, la casa posee el cercano manantial de agua de Tarlogie Springs en Tarlogie Hills y utiliza el grano de cebada de las producciones locales.

Con todo, la clase e intensidad de este Quarter Century lo convierten en el más raro y especial de los whiskies de Glenmorangie, complejo, intenso, sugerente y de profundos sabores a frutos secos, zarzamora, ciruela y dátiles junto a chocolate, café y canela. Y de un magnífico color oro viejo.

glenmorangie.es