Las bodegas jerezanas de Sánchez Romate sorprenden con Uno en Mil, un brandy solera gran reserva que, a simple vista, parece un whisky Single Oak Cask, ya que ha sido envejecido siguiendo este tipo de maduración escocesa (procedente de una bota de roble americano única). Destilado a baja graduación, finas holandas de alquitaras procedentes de vinos de la variedad Airén han envejecido para lograr un producto único, ya que sólo se han embotellado 1.000 unidades, numeradas y firmadas por el maestro de brandies Ricardo Real.
En la bodega de Barreras envejecen 1.000 botas de holandas, de ahí el nombre de la etiqueta. De ellas, Real ha seleccionado una a una las más relevantes para crear esta edición única. "Quiero respetar los matices de cada bota, su crianza", afirma el experto. Un brandy suave y delicado, complejo en matices, que se recomienda tomar directamente o con un poco de agua o hielo (25 €, 70 cl.). Una joya para entendidos en destilados.