¿Qué buscan los bebedores de whisky?, ¿qué sabores, matices y aromas les resultan más agradables? Lo cierto es que para gustos los colores, pero Glenmorangie que lleva desde 1843 –el año de su fundación- explorando este universo, ha decidido lanzar una edición limitada creada según los gustos de los fans de esta bebida. Un whisky diseñado y elaborado exclusivamente para ellos.
Se llama Glenmorangie Taghta y se comercializarán 12.000 botellas. Es el último single malta de la marca y también el resultado de una encuesta, Maestros en Barricas, en la cual la destilería escocesa decidió preguntar a amantes del whisky de 30 países sobre sus gustos y preferencias. Los participantes han dado su opinión en todas las etapas del desarrollo de este nuevo whisky, desde las barricas que se han utilizado hasta el mismísimo etiquetado.
Una garantía segura de que el Glenmorangie Taghta hará las delicias de más de un paladar, ya que ha encontrado el equilibrio entre la artesanía de tierras escocesas y la última tendencia: preguntarle al consumidor qué quiere y cómo lo quiere. Así lo ha afirmado el Dr. Bill Lumsden, director de destilación y creación del whisky Glenmorangie, quien destaca que “ningún otro whisky ha implicado a los consumidores en su proceso de creación”.
Pero, ¿a qué sabe esta bebida? Tras el primer trago deja en el paladar notas saladas y se pueden apreciar los toques dulces de la naranja caramelizada y el limón, combinados en la medida exacta con aceitunas y roble tostado. Una vez que se degusta, el sabor que permanece recuerda al toffee, mezclado con chocolate y dátiles.
Su textura es aceitosa y suave, agradable en cuanto a aroma y tremendamente sugerente en cuanto a sabor. Las botellas de Glenmorangie Taghta, que tienen un precio de 90 euros, estarán disponibles en todo el mundo y también en la tienda de la destilería en las Highlands escocesas.