Möet & Chandon Grand Vintage 2004.
Bebidas

Champagne vintage

Brindemos por un futuro brillante con un champagne excepcional: Möet & Chandon Grand Vintage 2004.

El 2004 fue un gran año de uvas, vino y rosas... tanto es así que Möet & Chandon compuso un nuevo champagne vintage que, tras 7 años envejeciendo en las antiguas bodegas de la maison francesa, podemos ya saborear en los más selectos y exclusivos restaurantes.

Each Moët & Chandon Grand Vintage must tell a story, and it has to offer a new experience. Y es que un champagne vintage es una mezcla única, deliciosa e irrepetible que se crea sólo en los años de cosechas excepcionales; no es por eso de extrañar que sea la maison más antigua de Champagne la que puede alardear de poseer la más grande colección de Gran Vintage, 70 soberbias añadas que empezaron en 1892 y continuan en 2004 porque así lo decidió Benoît Gouez, chef de las bodegas Möet & Chandon.

Además de tomar la decisión final acerca de si un añada ha de ser o no objeto de un Grand Vintage, el chef de la maison ha de supervisar la composición del champagne y su maduración; en este punto Möet & Chandon combina su tradición con importantes dosis de innovación.

Existen convenciones generalmente aceptadas acerca de la proporción en la que las tres variedades de uva que componen el champagne -chardonnay, pinot noir y pinot meunier- han de combinarse; es precisamente esta convención la que empiezan a romper en Möet & Chandon con su Grand Vintage 2000 para continuar en esa senda con el nuevo Grand Vintage 2004, decidiendo las proporciones ideales en base, únicamente, a las cualidades de cada variedad en cada añada. A esto se suma la prologación del periodo de maduración en bodega y el resultado es... delicioso.

38% Chardonnay, 33 % Pinot Noir, 29 % Pinot Meunier es la combinación mágica de 2004, un año de cosecha excepcional cuyo champagne vintage, así medido, sale en 2012 de las bodegas para soprender, brindar y enamorar. Es un champage alegre, como de primavera, por su intenso sabor afrutado y los toques de pimienta que le añaden un punto picante; de textura suave y delicada, resulta un champagne irresistible.

Brindemos pues por un futuro brillante con un champagne excepcional: Möet & Chandon Grand Vintage 2004.