Motos

Moto Talbott Collection. Un sueño de museo o un museo de sueños

El museo de motocicletas de Robb Talbott en California es toda una colección de sueños sobre dos ruedas.

Todos los museos, muestren y conserven lo que sea que muestren y conserven, tienen en común que son una colección de sueños o de creaciones de soñadores. Sueños de genios que pintaron lo que soñaban o lo que veían para que nosotros lo soñáramos como ellos. Retratos de sueños de poder, esculturas que sueñan con ser perfectas o que de imperfectas quieran terminar por ser humanas. En el caso de Robb Talbott los sueños iban sobre dos ruedas desde que se montó de joven en una Honda de 50 cc de campo a través y descubrió la cosa más divertida que había hecho nunca. Fue un amor a primera rueda. Y va para eterno, que ya sabemos que todos los sueños lo son. Robb siguió montando sobre cacharros de dos ruedas y siguió adquiriendolos, al tiempo que estudiaba diseño o se dedicaba a sus viñedos.

La revelación definitiva, sin embargo, no vino mientras soñaba, si no de otro museo: la exposición realizada por el Guggenheim "El arte de la motocicleta". Después de comprender que la belleza está escoondida en una aleta de refrigeración de un cilindro de una Kawasaki de 1976 o en la curva del manillar de una Harley de 1922, Robb comenzó a llenar el granero de su propiedad con las motos que había ido adquiriendo y con las que comenzó a restaurar desde diferentes grados de deterioro. De repente el granero se le quedó pequeño. En 2015, vendió el viñedo y decidió dedicarse en cuerpo y ruedas a las motos. Creando la Moto Talbott Collection con 140 motos de 12 países diferentes. Su dedicación a esta tarea se resume en las tres palabras que coronan el museo: preservación, restauración y educación.

Motocicletas de China, Checoslovaquia, Bélgica, Italia, Estados Unidos, Inglaterra y... España, con un trío de Bultaco y un par de míticas Montesa. Motos de cualquier estilo y época, por que la única razón de que un vehículo en concreto esté en en Museo Talbott es la belleza escondida en él. La colección de Robb es un sueño para cualquier aficionado a las motocicletas, su arte y su filosofía. Por supuesto, el primer soñador es él mismo, y su amor por lo que hace.