Una de las competiciones de motociclismo más antigua y popular del mundo, y es posible que también la más peligrosa, el Tourist Trophy Isla de Man, que se celebra desde 1907, incorporó a sus categorías de inscripción en 2010 a las motocicletas eléctricas. El año pasado participaron en la carrera nueve prototipos, bajo el formato de contrarreloj. Los ganadores de las primeras posiciones fueron los pilotos del Equipo Mugen, y la tercera posición la ocupó un prototipo de la marca norteamericana Victory propulsado por un motor Empulse, que hizo el recorrido a una media de 180 km/h. La versión de calle de ese prototipo ha salido a la venta (de momento, sólo en EE.UU.) con el nombre de Victory Empulse TT.
La Empulse es una moto con todas las de la ley. No tiene nada de prototipo futurista ni parece otra cosa que una motocicleta de las que no van precisamente lentas. Su motor eléctrico de imán permanente de inducción CA entrega una potencia de 54 CV con un par de 80,7 Nm, y lleva a la Empulse a alcanzar una velocidad máxima de 160 km/h. Unos números suficientes para convencernos de su fuerza, alimentada con una moderna batería Brammo de ion-litio de 10,4 Kwh integrada en la estructura de la moto que puede ser recargada hasta en 4 h. dependiendo del cargador utilizado y que da una autonomía de entre 160 y 104 km por carga dependiendo del modo de conducción utilizado, teniendo en cuenta que el modo Sport entrega un 20% más de potencia al motor.
La Empulse es bella y silenciosa, con una caja de cambios de 6 velocidades, aunque en realidad no tenga exactamente la misma funcionalidad que en una moto convencional y se asemeje más al uso de las marchas en una bicicleta, con lo que la moto puede pararse con una velocidad engranada sin necesidad de apretar el embrague. Si alguna vez soñamos con que las motos eléctricas llegarían a ser una realidad, la Victory Empulse TT nos despierta para decirnos que ya no necesitamos soñar.
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