Coches

Un nuevo Porsche 911 Targa 4 y 4S

Porsche recupera su pasado para afrontar el futuro.

Cuando en 1995 Porsche lanzó al mercado el modelo 993 del 911 Targa incorporó a su diseño el techo panorámico electrónico, todo un avance tecnológico que suponía además romper con el diseño que había caracterizado a todos los Targa desde su lanzamiento treinta años antes. Sin perder la línea de diseño de la casa, el inconfundible arco antivuelco de seguridad de acero inoxidable desaparecía y por tanto su diseño icónico.

Aquel arco que respondía a una ingeniosa respuesta de Porsche a las limitaciones en materia de seguridad norteamericana de los convertibles y dotaba al 911 tanto de un confort desconocido hasta entonces en vehículos descapotados como de un aspecto que lo convertiría en un vehículo emblemático.

Bajo la misma premisa del diseñador del 911, Ferdinand Alexander Porsche, “Un producto formalmente armonioso no necesita adornos”, han tenido que pasar otros 20 años más para que volvamos a ver el perfil único de un Porsche Targa con un arco absolutamente renovado. Los nuevos Porsche 911 Targa 4 y 4S recuperan aquel arco branquiado y se convierte en un descapotable automático que recoge el techo tras los asientos traseros en tan sólo 20 segundos, con un sistema que “extremadamente estable” que incorpora en su fabricación dos elementos planeo de magnesio para la sujeción de la capota.

“Un producto formalmente armonioso no necesita adornos”

El lanzamiento de los dos nuevos 911 Targa 4 supone mucho más que un simple rediseño o desarrollo de su capota. Con un consumo en carretera de entre 8,2 y 12,4 litros y urbano de 11,2 a 18,9 litros, incorpora en su clásica trasera el motor bóxer de 3,4 litros en el 4 y de 3,8 litros en el 4S. El primero, de 350CV, desarrolla una velocidad máxima de 282km/h y una aceleración de 0 a 100km/h en sólo 5,2 segundos, con un cambio de 7 marchas. El segundo. el del 4S, de 400CV, tarda 4,6 segundos en alcanzar los 100km/h desde 0 y alcanza los 294km/h. Ambos con el sistema de arranque y parada automático.

Y más, el Porsche Traction Management que optimiza la distribución de fuerza entre los ejes trasero y delantero, el Porsche Dynamic Chassis Control que estabiliza el balanceo y minimiza la inclinación del vehículo en las curvas y sobre firmes irregulares, el Porsche Active Suspension Management que consigue redondear la conducción del 911 Targa 4 a placer del conductor entre una conducción deportiva rígida o confortable, los discos de freno cerámicos perforados de alta competición, faros Bi-Xenón, luz de curva dinámica…

El interior de los nuevos 911 Targa 4 recogen también todos los principios innovadores y de diseño en los que la forma sigue a la función y se elimina el artificio frente a la belleza de los elementos armónicos, desde el elegante cuadro de mandos a los diseños deportivos en piel de sus asientos pasando por la consola central con una unidad de mando centralizado con pantalla táctil de alta resolución de 7 pulgadas. Incorpora además el sistema de sonido envolvente hit End de Burmester.

De un modelo que nació hace 50 años, con el nuevo 911 Targa 4, Porsche logra volver a sacar al mercado un nuevo deportivo capaz de convertirse como su antecesor en un icono de este siglo.

Salir de la versión móvil