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Rezvani Beast Alpha. Tengo una diablura vestida de azul

Rezvani Beast Alpha, un pequeño gran deportivo sorprendente ya desde que abrimos (y de que manera) sus puertas.

Al igual que los buenos purasangre, la diablura de color azul de las fotos que acompañan estas letras, y que tiene el nombre de Rezvani Beast Alpha, tiene a quien salir en su árbol genealógico.  De una parte, Rezvani Motors, la pequeña marca californiana que los produce, debe su nombre a Ferris Rezvani, un diseñador de automóviles que ya tenía en su haber el supercoche belga Vencer Sarthe, y que ha trabajado para empresas no precisamente dedicadas a las batidoras, como Aston Martin o Ferrari. Por otra, la base del Beast Alpha no es otra que el Ariel Atom, un bólido tan extravagante, extrovertido y extremo como potente y rápido; un biplaza con apariencia entre coche de carreras sin carenados y kart inflado por hormonas que desarrolla 300 CV para sólo 485 kg de peso. Se puede decir que el Atom pone la diablura, y Rezvani la viste de azul.

El Alpha es tan sólo el último desarrollo en llegar del Beast, más completo, cómodo y "civilizado" que sus predecesores, el Beast y el Beast X, con los que comparte la mecánica,  un motor de origen Honda con 2.4 litros de capacidad y 500 CV de potencia, aunque mejorado en esta ocasión añadiendo un compresor Rotrex y renovando el sistema de admisión, a la vez que se refuerzan el árbol de levas y los pistones.  Lo que si es exclusivo del Beast Alpha es el chasis de aluminio y la carrocería de fibra de carbono, materiales que permiten que su peso no exceda de los 890 kg. El resultado es una excelente relación potencia/peso que otorga al Rezvani una aceleración de 0 a 100 en 3,2 seg. y una velocidad máxima ligeramente superior a los 280 km/h.

Con todo y con eso, lo que más llama la atención en el Rezvani Beast Alpha es un detalle que suele pasar por accesorio o cotidiano en el resto de automóviles, sean deportivos o no: el sistema de apertura de las puertas, en este caso denominado Sidewinder, que las mueve pivotando sobre un brazo inferior que las desplaza hacia adelante, permitiendo que accedamos a un interior donde los materiales, el diseño y la tecnología se han cuidado al detalle. El Beast Alpha es una diablura vestida de azul, y es posible que para muchos tenga más de bello que de bestia.

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