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Pagani Zonda Fantasma Evo. Bicho bueno nunca muere

No hay nada como tener amigos tan especiales de los que te fabrican un modelo único de un superdeportivo: el Pagani Zonda Fantasma Evo.

Hay una extendida práctica de nuestro lenguaje cotidiano que consiste en calificar determinadas prácticas u objetos que nos gustan con calificativos negativos con los que sin embargo queremos expresas todo lo contrario a algo negativo. Por ejemplo, si miramos las fotos del nuevo one-off de Pagani, no sería extraño que de nuestros labios salieran frases como "Menuda bestia" o "Pedazo de bicho", sin que por ello estuviéramos pensando en la obligatoriedad sanitaria de acabar con su existencia. Algo que por otra parte, el fabricante italiano ha anunciado en más de una ocasión, para volver a deleitarnos con una y otra edición especial de regalo, como los bises de los conciertos. Será que el Pagani Zonda Fantasma Evo es un bicho, un bicho bueno de esos que nunca mueren.

Claro que la gente de Pagani apela para la reconsideración de su anunciado final de la gama Zonda que el Fantasma Evo ha sido construido para un amigo muy especial. Un amigo de esos que nos hace mirar nuestra agenda intentando adivinar cual de nuestros amigos especiales nos ha escondido el hecho de tener una fábrica de superdeportivos. Menos mal que nos gusta pasar el rato hablando.

No sabemos cual es la razón del apelativo de Fantasma Evo añadido al nombre de Pagani Zonda, pero teniendo en cuenta que lo único que sabemos es lo que podemos ver en las imágenes, la verdad es que desde nuestro punto de vista le viene como anillo al dedo lo ponerle un nombre tan del mundo de los espíritus.

Puestos a elucubrar, los especialistas en la firma italiana intuyen que lo más lógico sería que montara el V12 AMG-Mercedes de 7.3 litros que ha propulsado las últimas unidades del Zonda, asociada a una transmisión automática de 6 velocidades, con una potencia de 760 Cv, con números tan excepcionales en las prestaciones como los 3,4 segundos en alcanzar los 100 km/h o los 365 km/h de velocidad punta. Un bicho que esperemos se siga resistiendo a morir.