Italia es una tierra creativa y de diseño que no deja nunca de sorprendernos, importa poco si hablamos de moda, cosmética o automoción, Italia tiene siempre un ejemplo y una respuesta, una firma de referencia ante la que el mundo no puede menos que rendir su gusto.
Pero, si es es así, lo es porque algo hay en el ambiente y en las gentes, en el lugar que habitan, en su modo de mirar al mundo y de pintarlo, en su forma de descubrir qué hacer y el particular modo de hacerlo que es muy suyo y da como resultado productos únicos.
Productos como este nuevo superdeportivo que es actualmente poco más que una idea y una muestra y que nada tiene que ver con las firmas punteras de la automoción italiana; tiene que ver con Sicilia y con Giusseppe Ferrazano que es quien lo soñó y lo hizo proyecto, también con Ternicar que es quien lo montó para enseñarlo al mundo y tiene que ver, en definitiva, con la capacidad creativa italiana que da lugar ahora a un coche eléctrico como no hay otro.
Se trata de un nuevo coupé con motor eléctrico e italiano, de diseño un tanto elegante y agresivo, como corresponde a un coche superdeportivo; su autonomía se estima en las 300 millas y su aceleración lo lleva a de 0 a 60 millas por hora en 3 segundos y medio.
Cabe que, como a nosotros, te haya llamado la atención el nombre de este nuevo concepto de superdeportivo, Lavinia; sí, efectivamente es un nombre de mujer elegido, y no precisamente al azar, por el autor de este diseño, Giusseppe Ferrazzano; es el nombre de ella, de su chica, de su amor... él confiesa que nombró así su diseño por lo mucho que Lavinia significa para él... y nosotros no podemos dejar de pensar que cabe que fuera también en compensanción por tantos momentos de abandono que debió él regalarle mientras trabajaba en este espectacular superdeportivo... pero no lo diremos muy alto y nos limitaremos a disfrutar de este nuevo proyecto que se hace hueco en el mundo de los coches deportivos.
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