Muchas veces, cuando hablamos, leemos o escribimos sobre superdeportivos, parece que estamos jugando al juego de quién lava más blanco. Cada mejora, cada modelo, cada lanzamiento promete ser lo máximo y convertirse en inolvidable. Cada actualización lleva al fabricante a repetir conceptos y adjetivos que se supone ya habían sido superados. Y hay veces, pocas, que te encuentras con un Lamborghini Huracán Performante. Hay veces, pocas, que te encuentras con números como 6 minutos, 52 segundos en el circuito norte de Nürburgring, el mejor registro de un coche de serie para una vuelta en el infierno verde. Eso son respuestas incontestables. Eso son datos puestos sobre el asfalto. Son ojos pegados al escaparate, dedos señalando. Lo queremos.
El Perfomante parece veloz desde la primera mirada. El frontal muestra agresividad con las tomas de aire laterales y el nervio central entre el borde del morro y el spoiler delantero, mientras que en los laterales la bandera italiana decora las taloneras y el conjunto se destaca compacto y deportivo. La trasera muestra el tono bronce del motor V10 a través de la cubierta de Plexiglas y nuevos alerón y difusor traseros para completar con la doble salida del escape una terminación inspirada en los Lamborghini Super Trofeo de competición. También de color bronce son las espectaculares llantas forjadas de 20″ Narvi que montan los nuevos Pirelli P Zero Corsa.
Pero no son solo las formas, también son los materiales lo que convierten al Perfomante en un animal del infierno verde. La marca italiana ha patentado el Forged Composite, un material mezcla de aluminio y fibra de carbono que es más ligero, moldeable y resistente, y que utiliza en los spoiler delantero y trasero, el capó del motor, el difusor y el paragolpes trasero, adelgazando 40 kg con respecto al anterior Huracán. También se utiliza el Forged Composite en el interior, junto con Alcantara y la fibra de carbono, eliminando asimismo todo aquello que no sirva al propósito del Perfomante: ser veloz.
Pero siendo importantes en sí mismos, tanto el diseño como los materiales del Pefomante sirven a un propósito superior: ser el soporte del innovador sistema de aerodinámica activa: ALA (Aerodynamica Lamborghini Attiva). El sistema controla el flujo del aire a través de la carrocería para modificar en centésimas de segundo las cargas aerodinámicas y emplearlas en conseguir que el Perfomante juegue con la carretera, formando parte de ella. Por supuesto, el corazón del Lamborghini Huracán Perfomante no iba a estar exento de añadir su potencia a todo este cúmulo de virtudes. El V10 llega a los 640 CV de potencia a 8.000 rpm y 600 Nm de par a 6.500 rpm, con el 70% de este último consiguiéndose a partir de 1.000 rpm. La traducción al asfalto de todo lo dicho es el récord de vuelta en el infierno verde, los escasos 2,9 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h y los 325 km/h de velocidad punta. Abran paso. Ha llegado el Lamborghini Huracán Perfomante, el más rápido del infierno.
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