El modelo en el que se basa el nuevo Hennessey Venom F5, el Venom GT, dejó a todo el mundo asombrando marcando un récord de velocidad de 435,31 km/h. Es la marca que quieren pulverizar en la firma de Lotus y todo apunta a que lo van a conseguir, ya que las primeras pruebas han arrojado, en condiciones muy especiales de viento, puntas de 467 km/h.
No es la única cifra que va a pulverizar de su 'hermano mayor'. Otra es la aceleración, batiendo los 13,63 segundos que tarde el Venom GT en alcanzar los 300 km/h y rebajando a 14,51 segundos el tiempo necesario para ponerse de 0 a 322 km/h. "Hemos recogido todo lo que aprendimos en las numerosas pruebas de velocidad a las que sometimos el GT para crear una nueva experiencia aún mejor", explica John Hennessey, fundador de la escudería.
Pero no solo es la velocidad lo que llama la atención del nuevo F5. Ya su nombre es toda una historia, ya que no se trata de una combinación alfanumérica más. Es el nombre con el que se catalogan los tornados más importantes. En concreto, fue la marca del que sufrieron en Fujita, Japón, y que va en consonancia con la potencia del nuevo vehículo.
Realizado en fibra de carbono, el nuevo súper deportivo, con un diseño aerodinámico y futurista, apenas pesa 1.300 kg. En su diseño destacan las diferentes líneas curvas, que se van complementando entre sí, el chasis bajo y el tubo de escape de tres salidas, muy parecido al de los Fórmula 1. No faltan detalles típicos de este tipo de coches como el alerón trasero, ni las luces con diseños diferentes.
Del nuevo Hennessey Venom F5 solo se van a construir 30 unidades, que estarán en las carreteras no antes del año 2016. Para hacerse con uno, hay que encargarlo y desembolsar, al menos, los 927.000 € que costó el GT; aunque lo esperable es que sea una cantidad aún mayor, rozando el millón de euros.