Que a las 7:00 A.M. de la mañana te suene el despertador, es parte de esas rutinas a las que terminas acostumbrándote.Tener un puesto de responsabilidad, generalmente no es algo que tenga que ver con el azar, y en ese haberlo conseguido, amén de las horas de trabajo, las reuniones, el insistente sonido del teléfono, y los viajes, suele existir un placer consustancial. Y para ella es así cada día.
Pero en este enumerar de situaciones elegidas, sería injusto no hablar de aquellas que suponen bienestar sin contrapartidas. Elecciones guiadas por un estilo de vida, en la que los valores prácticos y estéticos, juegan un papel principal. Así sirviéndonos de ella, y de esa vida que podría ser la de muchas, vamos a entrar en cuestiones de kilómetros y en cómo hacerlos, que en nuestro caso marca la diferencia, con la conducción de este descapotable.
Dicen que conducir uno inspira optimismo y libertad. Eso dicen, y ni a nosotros, ni a ella, nos cuesta imaginárnoslo viendo el nuevo BMW serie 4 Cabrio, que supera al anterior serie 3 Cabrio de la casa alemana, aunque mantiene la parrilla ovoide doble, los faros dobles y las grandes entradas de aire en el faldón delantero.
Está claro que lo estético está superado, quiero decir que no es difícil sentir al verlo, una de esas reacciones bioquímicas, rápidas e intensas, con las que descubres que lo que ves es lo que siempre habías estado buscando. Una mezcla de necesidad y confort, que bajo su techo de tres segmentos abatibles y ese sistema opcional de calefacción a la altura de la nuca, lo coloca en ese montante que todos tenemos de "mis objetos de deseo".
Una apariencia deportiva con un interior elegante, que se completa con cinco variantes de equipamiento y tres líneas de acabado: Sport, Luxury y Modern Line. A las que les acompañan unas nuevas dimensiones, con una longitud de 4.638 mm, una anchura de 1.825 mm (2.017 mm contando con los retrovisores), una altura de 1.384 mm, y un maletero cuya capacidad va de los 370 litros a los 220 litros, según tenga la capota plegada, o no.
Y todo con ese componente de personalización mediante líneas de equipamiento y detalles exclusivos, como lo son el nuevo asiento con guía integrada para el cinturón de seguridad con sistema de regulación eléctrica, y un climatizador que en cuanto bajas la capota, regula automáticamente la temperatura del coche, dependiendo de la temperatura exterior y de la velocidad a la que circulemos.
Así que ya lo decíamos, bienestar sin contrapartidas, placer entre los 245 y los 306 caballos, según sea diésel o gasolina, un cambio manual de 6 velocidades, con opción de 8, y una velocidad máxima entre los 235 km/h y los 250km/h respectivamente. Aerodinamismo para rodar y comodidad para disfrutar del camino, incluso de ese que comienza después del sonido del despertador, y de ahí a más...