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Aviar R67, porque los rusos también quieren su propio coche eléctrico

Aviar Motors R67 es un vehículo eléctrico ruso que nos recuerda (¡y mucho!) al clásico Mustang americano...

Seguimos a vueltas con la movilidad urbana, con los protocolos anticontaminación, con las diferentes opciones de motorización para nuestros vehículos y con la sensación de estar afrontando un problema imposible o de estar, al menos, afrontándolo mal; sea como fuere de lo que no nos cabe duda alguna es de que el modelo actual se agota y de que la solución pasa por energías renovables y no contaminantes, dicho de otro modo, sabemos que la solución está en los motores eléctricos, una máxima ésta que nos lleva a otro problema imposible por lo que tiene de círculo vicioso: por mucho que mejore el rendimiento y durabilidad de las baterías, necesitamos puntos de recarga pero no los habrá hasta que haya un parque automovilístico de vehículos eléctricos que justifique la inversión correspondiente... del mismo modo que no habrá más vehículos eléctricos en las carreteras hasta que tengamos la certeza de que tendremos el mismo problema para recargar sus baterías que para llenar los depósitos de nuestros coches diesel o gasolina del correspondiente combustible; llegará el momento en el que ese círculo vicioso se convertirá en una virtuoso que haga mejorar la calidad del aire de nuestras ciudades, de eso también tenemos un notable grado de certeza y no sólo nosotros, también las firmas automovilísticas ¿a santo de qué sino tanto nuevo modelo híbrido o eléctrico? incluso los rusos se han animado al diseñar el suyo, es el Aviar Motors R67.

En Aviar Motors parten de la estética del Mustang pero de ahí en adelante diseñan su propio vehículo: chasis de aluminio, carrozado con paneles de fibra de carbono emulando al Mustang Fastback del 67, faros y pilotos LED, suspensión neumática y llantas de aleación de 20 pulgadas; en cuanto a la motorización, el Aviar R67 es 100% eléctrico, cuenta con dos motores que entregan un total de 840 CV que le permiten presumir de una velocidad máxima de 250 Km/h y de una aceleración enviable, pasa de 0 a 100 km/h en 2,2 segundos; ¿autonomía? entorno a los 500 kilómetros.