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Aston Martin DB9... y que los Reyes te traigan carbón

Tras el Vanquish, analizamos la segunda Carbon Edition de la firma británica para 2015: la del DB9.

Ya os hemos hablado del espectacular giro al 'lado oscuro' de Aston Martín con su Vanquish Carbon Edition, pero el próximo año serán dos las propuestas de la firma británica en contar con este sobrenombre. Y es que también echará a rodar una versión muy especial del DB9, que coincide con la anterior en presentarse completamente en negro.

Destaca en él una carrocería que presenta zonas fabricadas con fibra de carbono, concretamente los respiradores laterales, el splitter delantero, el difusor de aire posterior y las carcasas de los retrovisores. Se mezclan con otros elementos deportivos y elegantes como unas llantas de aleación de 20 pulgadas de diámetro, 10 radios y efecto diamante. Entre los radios de estas llantas, pinzas de los discos de freno del color que elija el futuro conductor entre estos tonos: rojo, amarillo, gris o negro.

En el interior, en cambio, es el negro el único color posible, con una puesta en escena deportiva y de lujo en la que también está presente la fibra de carbono. Eso sí, detalles como los pespuntes del cuero en rojo destacan sobre la piel oscura. Todo, como siempre en Aston Martin, realizado a mano.

El motor que monta el DB9 Carbon Edition es el mismo que la versión convencional, es decir, un propulsor de gasolina montado en posición central-delantera, de 6,0 litros, 517 caballos de potencia y 63,22 mkg de par motor. Genera fuerza a las ruedas traseras a través de un cambio automático de seis marchas y permite una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos, además de una velocidad máxima de 295 km/h.

Esta edición Carbon Edition se puede adquirir en versión Coupé y Volante (descapotable); y los que tengan 'alergia' al negro (Black Carbon Edition) también pueden hacerse con él en blanco (White Carbon Edition). Este coche es más pequeño que el Vanquish, que es realmente el buque insignia de Aston Martin actualmente. Los DB9 y V8 son sus lugartenientes, por decirlo de algún modo, sin detalles de Fórmula 1 de la casa Ferrari.