Aviones

Aeromobil, el coche que vuela

Aeromobil, un coche que vuela estrenado en los 90 que presenta su tercer prototipo en 2014.

Puede parecer una locura o una idea sacada de alguna película de ciencia ficción, pero ya lo decía Henry Ford en 1940, la combinación entre un avión y un coche llegará, y, añadimos nosotros, cabe incluso que ya esté aquí.

No dirás que el asunto no resulta tentador, piensa en las inmensas colas de vehículos que dan vida a la hora punta en tantas ciudades del mundo e imagina que, al menos algunos de ellos -el tuyo, sin duda- pudiesen salir volando... Cierto es que la cosa tiene algo más de complejidad pero, en todo caso, es una idea, una que tiene prototipo y marca la senda del futuro.

Aeromobil es efectivamente una idea que comenzó a fraguarse en los 90 en Eslovaquia y que en 2014 presenta una versión -la 3- en la que los detalles y el estilo cobran importancia junto al propio diseño que es el que corresponde a su último prototipo, el 2.5.

Se trata de un vehículo biplaza de aire deportivo que, en carretera, pliega sus alas y mantiene el tamaño de un turismo, alcanza una velocidad máxima de 160 km/h, tiene un consumo de 8 litros a los 100 kilómetros y puede repostar en cualquier gasolinera. Como aeronave, Aeromobile despliega sus alas y consume unos 15 litros de combustible por cada hora de vuelo, alcanza una velocidad máxima de 200 km/h y mínima de 60 km/h, en el despegue se queda en los 130 km/h.

Acompañamos este artículo con las imágenes y el video correspondientes al modelo 2.5, para que puedas ver cómo se desenvuelve en la vida diaria un coche volador, además añadimos los bocetos correspondientes a la última versión, la 3 que, sobre la 2.5, dedica tiempo y detalles al aspecto de este vehículo y a su funcionalidad, incluyendo la comodidad de sus dos ocupantes.

Se trata de una idea eslovaca que, probablemente, acabe por ser precursora de la movilidad que viene.

Salir de la versión móvil