La idea de movernos utilizando nuestras manos, no supone una novedad. Porque bien visto, desde los primeros años de nuestra vida, hemos hecho uso de las extremidades superiores para mucho más que comer, nadar, o alcanzar las cosas, y desplazarnos estaba en esa lista.
Pero también es verdad que la forma en la que lo hemos hecho, no comprendía el uso de ningún mecanismo. Sólo manos y pies en acción, hasta que un día alcanzamos ese punto de equilibrio que nos permite estar erguidos, y después todo son posturas.
Y aquí es donde entra en escena el cirujano Lex van Stekelenburg, quien después de un complicado historial con su espalda debido a su trabajo, decidió crear un artilugio que ayudase a mantener una buena postura, y además atenuase las molestias. Y así surgió la bicicleta de pedales manuales.
Una idea que cogió al vuelo el estudio holandés TSG Essempio, para desarrollar la 4StrikeBike. Aerodinámica, ligera, y con un cigüeñal que permite alternar los pedales superiores e inferiores, para así poder utilizarla si se prefiere, como una bicicleta de las de siempre, con tan sólo un clic.
¿Pero quién se queda con 50 pudiendo utilizar 128 músculos? Nosotros preferimos ignorar el clic, poner nuestra espalda en orden, y animar a los de Essempio a que la desconceptualicen.
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