Bicicletas

Aracnide, o la forma que tomaría una araña si fuera bicicleta

Fabricada en Italia y de titanio, la Aracnide sólo pesa 7,5 kg. y se pega al asfalto como las arañas a los techos.

Dicen los fabricantes de Aracnide que es la primera bicicleta de carreras del mundo diseñada para el futuro. Lo dicen basándose en la tecnología, el estilo, los materiales, el diseño... y que todo ello se ha realizado en Italia. Es posible que no sean los únicos fabricantes que pretendan tal cosa, ya sabemos como es esto del marketing, pero la verdad es que los chicos de TºRED tienen bastantes bazas para sustentar la afirmación. De hecho, basta echar un vistazo a la Aracnide, con ese color negro y esos detalles rojos, con esa pinta de vehículo dispuesto a todo, para empezar a estar de acuerdo con ellos.

Pero el dato más importante para considerar a esta bicicleta algo tan serio como una puerta al futuro es la afirmación de que no habrá dos Aracnides iguales. Cada unidad está hecha a mano siguiendo las indicaciones de un software paramétrico con el que nos aseguraremos que las geometrías de rigidez y rendimiento serán las mejores, teniendo en cuenta el modo de uso, las características y las medidas de cada ciclista. Será nuestra Aracnide, y la de nadie más. En lo único que se parecerá a las demás "hermanas" salidas de las manos artesanas de TºRED es que mantendrá un peso ligeramente superior a los siete kilos.

En el origen de todo esto está la geometria patentada del marco de la Aracnide, que combina cuatro aleaciones diferentes de titanio y que ha sido testada en los mejores centros internacionales de desarrollo y por los mejores profesionales del ciclismo. Nada como una Aracnide para subir y nada como una Aracnide para bajar. De casta le vendrá al galgo, pero Aracnide tiene ese nombre porque se pega al asfalto de la misma manera que una araña se pega a las paredes. Porque está hecha para eso. Es su naturaleza. Y será la nuestra cuando pongamos los pies en sus pedales.