Cuando no se quiere diseñar lo ya inventado, ni tan siquiera recrearlo, sino que se busca reinventarlo, es necesario hacer de la creatividad virtud; pocos son los que lo intentan (la mayor parte de los diseñadores se conforman con recrear lo ya creado) y muchos de ellos se estampan con las dificultades por las que son asaltados en un proceso creativo que es complejo porque supone la deconstrucción de lo ya inventado para comprenderlo hasta el último detalle y su reconstrucción en base a nuevos parámetros, nuevas ideas, nuevo estilo, nueva moda... Hay que ser un diseñador de primera para completar con éxito esta travesía, uno como Aras Kazar, quien se ha empeñado en hacer navegar a los pájaros con su nuevo trimarán (Wakinyan).
Su nuevo diseño, el trimarán Wakinyan, inspira su forma en la de los pájaros de modo que al ver el Wakinyan sobre el agua lo que pensaremos será en un pájaro flotando sobre ella; el casco de este excepcional trimarán cuenta con estabilizadores que evocan las alas de los pájaros, su estructura es de aluminio y hace del vidrio su material principal para que su interior esté abierto al mar; cuenta con 12 literas distribuidas en 5 camarotes además de con una suite privada para el propietario de la embarcación.
En cuanto a su poropulsión, el Wakinyan quiere ser eléctrico y montar además la tecnología hidroala para maximizar su rendimiento, un rendimiento por otra parte bastante notable, puede alcanzar una velocidad máxima de 32 nudos.
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