El AirYacht está formado por un yate de 60 metros de eslora y un dirigible de 200 metros, el resultado será un yate de lujo en el que se podrá volar; por el momento es solo un proyecto, un concept, pero no solo un sueño, tiene fecha de estreno: el año 2026.
El AirYacht permitirá a su propietario volar en una aeronave de helio y propulsión híbrida que puede elevarse hasta casi 3000 metros del suelo y a una velocidad de 50 nudos; y podrá hacerlo sin salir de su superyate de lujo de 1.100 metros cuadrados de los cuales 750 son interiores y se distribuyen en tres plantas; está pensado para que de 10 a 12 viajeros vuelen a placer acompañados por una tripulación de hasta 15 miembros que se ocuparán de pilotar este sorprendente medio de transporte y del bienestar del propietario y sus invitados (aunque sólo se necesitan 3 tripulantes para pilotar el AirYacht).
Dado que el AirYacht es, en esencia, un yate de lujo que puede volar, los servicios que ofrece a sus navegantes son los propios de ese tipo de embarcación: spa, sauna, hammam, gimnasio, piscina, jacuzzi... helipuerto para poder llegar volando al lugar en el que esté atracado el Airyacht y garaje de 45 metros cuadrados.
La innovación tecnológica del AirYacht salta a la vista y va incluso más allá de lo que se ve como demuestra el hecho de que no será neceario aterrizar el vehículo para poder desembarcar o embarcar pasajeros, cuenta con una especie de sistema de ascensor que permite hacerlo sin aterrizar el dirigible, solo posicionando el yate como si estuviese amarrado a puerto (o a tierra...).
No es que se estime que el AirYacht volará en 2026, es que ya se han recibido los primeros pedidos y pronto entrará en producción. Se estima que, a partir de 2026, se producirán de 1 a 4 AirYacht al año.
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