La naviera Hodgdon ha confirmado que esta primavera veremos una limusina navegando mares y rías, se trata de su último yate, una embarcación que rompe con la línea que suelen seguir los yates y veleros, salvo quizá los más vanguardistas, para utilizar un diseño propio de la automoción. El Limo Tender es, en realidad, una limusina preparada para navegar y es, además, tan lujosa y sofisticada como son las limusinas... y como lo es su precio a pesar de incluir una rebaja respecto al que marcaba hace unos meses: ronda el millón y medio de dólares.
El Limo Tender es una limusina para 11 pasajeros incluidos dos VIPs, por aquello del par de asientos VIPs disponibles en esta embarcación; sus acabados en madera, tanto en el exterior como, sobre todo, en el interior, marcan la diferencia y el punto de lujo que se elevan con el techo rígido para permitir, no sólo el fácil acceso al yate, sino también las óptimas vistas desde su interior.
Se trata de un yate de fácil acceso y absoluto encanto al que no le falta detalle porque, a todas las comodidades propias de un yate, suma las formas, maneras y estilos de una limusina y una copa de champagne. Y es que esta embarcación es elegante, sería propia de Bond o algún otro Sir inglés, de un tipo clásico en sus formas y moderno en su fondo... y quien dice un Sir dice una dama, claro está. Pero además, sería también propia de un superyate porque nos dicen desde Hodgdon que Limo Tender es, son sus poco más de 10 metros de eslora, el complemento perfecto de un gran yate de lujo.
Limo Tender es una embarcación propia de un mar cálido y pausado, ideal para atracarla en Mónaco o en Puerto Banús... claro que su precio es un millón y medio de dólares...
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