El astillero holandés Heesen Yachts tiene un merecido prestigio en el mundo de la navegación por su gusto a la hora de ponerse por delante retos cuyo cumplimiento no está al alcance de cualquiera. Y en este caso, el reto ha consistido en hacer realidad un proyecto de nombre en clave Kometa, un superyate perfecto que es el más grande construido por Heesen Yachts, uno de los 200 mejores yates entre los más grandes del mundo y uno de los yates más rápidos de su tamaño.
La clave del éxito del Galactica Super Nova de Heesen Yachts radica en la introducción del el Fast Displacement Hull, un concepto que los ingenieros navales de Van Oossanen and Associates tardaron 20 años en desarrollar y que ya pusieron en práctica en el vitoreado modelo Galactica Star, un poco más pequeño. Básicamente, el Fast Displacement Hull consiste en construir un megayate de 229 pies de eslora y 39 de manga completamente de aluminio y cuyo casco de perfil bajo incide en una igualmente baja resistencia hidrodinámica, sea cual sea el régimen de revoluciones. Esta característica combinada con el impulso proporcionado por un tercer motor jetstream de Rolls Royce para complementar a sus dos hélices de paso fijo, hacen que el Galactica Super Nova pueda alcanzar los 30 nudos de forma mucho más eficiente que la competencia.
Es uno de los yates más rápidos de su tamaño.
Elegante y aerodinámico, el diseño exterior, se lo deben al arquitecto naval Espen Oeino. El barco ofrece algunas características exteriores auténticamente envidiables y todos los espacios que se te ocurran. Puedes estar en Duplex Beach Club de la banda de babor de popa, o en la terraza, en el comedor o en la barbacoa. Con un sistema de flujo contracorriente para la natación y una cascada por la que cae el agua que la mantienen llena, la piscina tiene un impresionante fondo de cristal que permite que la luz natural ilumine el interior del barco. Y es ideal para darte un chapuzón después de una sesión de solárium, disfrutar de un relajante crucero o como zona de entretenimiento en una noche perfecta. En la cubierta inferior del Beach Club puedes darte una sauna, un baño turco o una simple ducha, además de tomarte una copa en el bar completamente equipado mientras ves cine al aire libre. Además, la cubierta de proa dispone de una sala de estar al aire libre adicional, y un pequeño helipuerto tipo Touch&Go que puede llenarse de tumbonas cuando el helicóptero no esté.
Por si todo ese espacio parece poco, los más de 350 metros pueden ampliarse 44 metros cuadrados más a través de plataformas abatibles desde las que alcanzar todas las máquinas acuáticas imaginables con las que pasar un divertido día en el mar. Para moverse entre unos espacios y otros, escaleras exteriores, y una escalera en espiral interior o ascensor que te llevarán a los cuatro camarotes dobles, al camarote VIP o a la suite principal que ocupa toda la manga del barco. Mucho más de lo imprescindible para alojar en su sofisticado interior, elegantemente diseñado por Sinot en colores crema con acabados en acero, madera y cuero, a doce personas con la comodidad de un cinco estrellas pero a una velocidad de crucero de 24 nudos, lo que supone aproximadamente el 75% de la potencia de sus dos motores. Su autonomía a 12 nudos es de 4.000 millas náuticas, lo que te garantizan unas vacaciones de lujo en el superyate prefecto bien lejos del puerto base y muy cerca de la superficie del mar.
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