Cuando hablamos de movilidad urbana solemos hacerlo valorando siempre dos variables, por una parte la mejor calidad del aire en las ciudades, y entonces pensamos en vías verdes, en restringir la circulación de según que tipo de vehículos y, por supuesto, en motorizaciones híbridas y eléctricas además de en motocicletas, bicicletas e incluso monopatines (aunque éstos últimos no sólo ganan adeptos últimamente sino también detractores); por otra parte pensamos en la inmensa cantidad de tiempo perdido en los transportes tanto públicos como privados cada día y en ese caso más que pensar soñamos, soñamos con volar y rezamos porque se conviertan en realidad algunos de los proyectos que hemos visto ya de taxis volantes o coches aéreos. Y para alimentar esos sueños llega esta noticia: Boeing y Porsche (dos firmas incuestionables del transporte aéreo y terrestre respectivamente) se alían para hacernos volar en las distancias cortas.
Esta asociación de Boeing y Porsche nace con el objetivo de explorar las soluciones de movilidad aérea y urbana y para ello, como no podía ser de otro modo, están trabajando en un prototipo del que por el momento sabemos pocas cosas aunque alguna interesante: se tratará de un vehículo totalmente eléctrico y de aterrizaje y despegue vertical.
No hay todavía fecha para la presentación de este prototipo ni tenemos claro cómo serán las soluciones aéreas de movilidad urbana en el futuro (si son) pero lo que sí sabemos es que cada vez son más las compañías, y las inversiones, en este sentido ¿llegaremos a vivir en ciudades con coches volantes? a saber... suena a priori más a ciencia ficción que a realidad, lo que sí nos parece más plausible es la opción de taxis aéreos porque el control del tráfico aéreo con una flota limitada y controlada se nos antoja más sencillo, claro que si por algo se caracteriza el ser humano es por su constante evolución y su gran capacidad técnica y humana para saltar barreras, con la ayuda de la tecnología podemos ser capaces de casi cualquier cosa ¿no crees?.