Desvelábamos días atrás a Sasha Luss envuelta en Dior Addict en una campaña sofisticada, elegante y de puro ensueño; tras el mundo onírico que Dior ha creado a imagen y semejanza de la inspiración de este aroma, para mostrárnoslo y seducirnos irremediablemente; descubrimos que no se trata de un aroma ya conocido como eau de parfum, sino también de eau fraîche y eau de toilet. Y nos llegan, además, en unos frascos de perfume únicos.
Manteniendo la misma forma de base cuadrada y estilizada figura, cada una de las esencias de Dior Addict se tiñe de un color: el perfume, en el que confabulan la flor de naranja y el jazmín de sambac sobre notas de vainilla desde 2012 y con la pérfida intención de encandilarnos, es negro y es, sin duda, el más sofisticado de los tres envases, como corresponde a un gran perfume.
Eau Fraîche tiene un delicioso y sugerente tinte rosado, evocación pefecta de las notas de freesía que se entremezclan con las de muguete y bergamota de Calabria entre almizcles blancos.
Y por su parte la novedad, la nueva nota discordante que pone Dior en 2014, es el eau de toilet de Dior Addict que luce tono oro y champagne en su envase, en el que guarda, como se guarda un secreto, los matices de mandarina de Sicilia, jazmín de Sambac y neroli de Túnez sobre un fondo de esencia de sándalo.
Dior completa así, al menos por el momento, una colección en tres notas, tres acordes tan perfectos que hacen honor a su nombre... crean adicción. Y es que la perfumería de la firma gala luce una intensa experiencia en el mundo de la nariz y los aromas florales que eran una absoluta debilidad para Christian Dior.
Ahora tan solo queda que elijas a cual de los Dior Addict vas a hacerte adicta...
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