Tener la oportunidad de entrar en el almacén de cuero de una firma artesanal de marroquinería es una experiencia que se queda en los sentidos. No solo en la retina o en el tacto de las pieles, de diferentes rugosidades, sino también en el olfato, ya que es un olor único, elegante, natural y sugerente. Adentrarnos precisamente en los de Toscana es lo que pretende Acqua di Parma con su última fragancia masculina, Colonia Leather, toda una oda a este material.
En las curtidurías de esta región italiana, las pieles están por todas partes, enrolladas o extendidas en las mesas de trabajo. De tacto suave y consistente, cuentan con infinitos matices de colores: cacao, marrón oscuro, tierra, tabaco... Y en el aire, un aroma sugerente a cuero y a madera, a especias y a resinas. Es lo que se ha querido emular en una composición que une estos ingredientes.
Entre las notas de salida encontramos el limón de Sicilia y el aceite de naranja brasileño, acompañados de un original acorde de frambuesa. Como notas medias, un corazón florido con esencias de rosa, madreselva, aceite de petit grain de Paraguay y tomillo rojo. Todo para llegar a un fondo original y que es el que revela la autenticidad artesana de Colonia Leather: el acorde de cuero que Acqua di Parma ha creado combinando aceite de abedul, rarísimas resinas de jara española y olíbano, madera de cedro de Marruecos y aceite de guaiac de Paraguay.
Colonia Leather pertenece a la colección 'Viajes de Colonia', que comenzó con Colonia Oud, inspirada en Persia. Mantiene con respecto a esta el color marrón chocolate del envase, con la forma clásica de Acqua di Parma. Se presenta en dos envases: 100 y 180 ml. (desde 160 € el primero), dentro de un cofre revestido a mano y enriquecido en su interior con satén bronceado. Sin duda, la elegancia de la marroquinería artesana convertida en la fragancia más exclusiva.
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