Sin duda, Guerlain es una de las firmas de belleza que más mima cada producto que lanza al mercado. El cuidado con el que deciden sus fragancias, los envases o incluso los spas en los que se pueden encontrar sus tratamientos es exquisito, todo para que estén a la altura de lo que sus clientes esperan y, sobre todo, pagan, ya que, al mismo tiempo, también es una de las marcas más caras y exclusivas.
A pesar de que algunos de sus productos, como los Meteorites, son mundialmente conocidos (hace unas semanas se lanzaba una edición limitada especial firmada por Pucci), otros son auténticos extraños para el público. Entre ellos destaca su colección de aromas para el hogar, compuesta por diferentes velas perfumadas de gran tamaño que se presentan en dos colores: negro y crudo.
Entre los primeros se encuentra 'Hiver en Russie', una evocación olfativa a la Rusia de los zares, con aroma de té del samovar y mirra; o 'Bois des Indes', que viaja a India para tomar el olor de maderas preciosas como el sándalo, además de otras especias.
Por otro lado, las velas de color crudo son 'Contes Tahitiens', que trata de reproducir el aroma de la Polinesia con flores de hibiscos; y 'Soudoir Vénitien', que homenajea a Venecia con polvos de arroz en su fórmula. Con cualquiera de los cuatro, cuya distribución es muy reducida en todo el mundo, se conseguirá un aroma en nuestro hogar único e inimitable.