Artesanía, magia, alquimia… ¡Qué sugerentes y evocadoras palabras! Tanto, que no precisan de casi nada más. Atraen por sí solas. Pero, sigamos. Poesía, irreverencia, Baudelaire… Sube el tono. La tentación se instala en cada rincón y el ambiente se caldea dejando intuir pasiones que rozan lo prohibido. Extrañas flores...“Et d’étranges fleurs sur les étagères éclosent pour nous sous des cieux plus beaux”. Las flores del mal…
Así, de la alquimia artesana de Carole Dichampt y Caroline Burzynski-Delloye –creadoras de la firma francesa cousu de fil blanc– y la esencia mágica de tres plantas de dudosa reputación –amapola, absenta y cannabis– nace Les fleurs du Mal, una deliciosa colección de perfumes y jabones artesanos inspirados en la fragancia tan singulares flores. Tranquilos. Su uso continuado no entraña riesgo de adicción.
Las tres eau de toilette, unisex y elaboradas con alcoholes provenientes de la agricultura ecológica, invitan a un tentador paseo por la subversión. Acordes acuáticos de espuma sobre fondo de musgo hacen estallar a una amapola ligera que danza con el viento; por su parte la absenta, atenuada con láudano y ajenjo, se endulza entre anís, regaliz y unas notas frescas de lavanda. Nuez moscada y vetiver, una pizca de pimienta y un toque de cardamomo cortejan el corazón de un cannabis que sorprende con la chispa final de la mandarina.
Cousu de fil blanc propone, además, una línea de jabones naturales elaborados con las mejores materias primas y la esencia de tan controvertidas plantas que convierten los rituales de higiene diaria en un placer irresistible. Para exfoliar y suavizar, los granos de amapola enriquecidos con miel biológica. La absenta, asociada al aceite de nuez, refresca y purifica todo tipo de piel, mientras que el cannabis es ideal para las pieles secas gracias a su riqueza en ácidos grasos.
Los productos Cousu de fil blanc solo pueden adquirirse en perfumerías y tiendas de cosmética de autor.
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