Ptisenbon de Tartine & Chocolat
Perfumes

¿A qué huelen los niños?

Los niños huelen a vida, a cariño, amor y ternura... a Ptisebon de Tartine & Chocolat.

Los niños huelen a vida y a risa, a lengua de trapo, gateo y trompicones, a cariño, amor y ternura, a protección y cuidado… a bebé y, tras 25 años con nosotros, a Ptisenbon de Tartine & Chocolat.

La frescura y naturalidad de las notas cítricas de salida explotan en la dulzura de los aromas florales: madreselva, lirio del valle, jazmín y ámbar blanco; es el aroma que acompaña al bebé desde la cuna hasta los primeros pasos y un poco más allá, el que lo transportará de nuevo a su infancia, a los días felices de descubrimiento y vida cuando, perfumándose ya con fragancias más densas, profundas y adultas,  perciba de nuevo ese aroma.

Y es que si algo son los aromas infantiles es evocadores, en ellos se condensa cada vivencia y cada recuerdo olvidado, cada sensación y emoción descubierta en los primeros estadios de la vida; en Ptisebon habita la magia de los cuentos, de la sorpresa, el miedo y la alegría que cada aventura despierta en los niños… el coraje del patito feo, la prisa del conejo de la suerte, el valor del león cobarde, las mentiras de Pinocho, la inteligencia del gato con botas... o la casita de Hansel y Gretel.

En una casita, que es también una hucha creada como un joyero, podemos encontrar ahora, en su 25 aniversario, Ptisenbon en un frasco de líneas sencillas, delicadas y ligeras en colores dulces y puros, de bebé, azul y blanco.

Los aromas y las evocaciones que despiertan acompañarán a lo largo y ancho de su vida a los bebés que lo son hoy y dejarán de serlo un día… Ptisenbon es sin duda un buen aroma que llenar de cuentos, vida, sueños, ilusiones, emociones y evocaciones para tu bebé…

Ptisenbon de Tartine & Chocolat

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