Peter Philips es el culpable de la belleza y romancitismo que promete la colección de maquillaje de primavera y Dior; se trata de un set de productos en tonos pastel en los que la luminosidad se convierte en el gran tesoro de tu rostro.
La piel es el lienzo al que todo maquillaje debe dar brillo, luz y belleza además de color, la tuya matizada en sus mejillas por los reflejos nacarados de Diorblush Glowing Gardens ganará frescura y juventud; y una vez la piel tiene los matices justos, los ojos y los labios se convierten en destino principal de ojos y bocas ajenas...
Con Dior Addict I Lash It Platina darás a tus cejas el volumen perdido para que sirvan de marco a unos ojos perfectos que lo son más si cabe al verse dibujados por un nuevo 5 Couleus Glowing Garden en el que se entremezclan el azul cielo con el melocotón, el gris perla y el azul jardín u otra en tonos rosa, verde anís, amarillo pálido y marrón irisado; es precisamente la paleta de color de los ojos la que nos lleva a las manos, porque las lacas de uñas de la primavera de Dior comparten matices con la sombra de tus ojos y así Dior Vernis se presenta en azul o verde suave, en rosa y en el inolvidable rojo peonía.
Los labios completan un maquillaje natural y deslumbrante a la vez y lo hace en dos productos: Dior Addict Lip Glow Pomade para dar brillo y Dior Addict Lip Glow Lilac para sumar cierto volumen y un toque de color.
La apuesta de Dior esta primavera, en lo que al maquillaje se refiere, es decidamente floral, dulce e incluso romántica, es también evocadora y nos lleva a Granville, lugar del famoso jardín de rosas de Christian Dior, y a un mundo de belleza en matices nacarados.
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